

Los salarios subieron 2,5% en octubre lo que los dejó por encima de la inflación para el mismo mes (2,3%). Sin embargo, el impulso fue netamente explicado por los informales que duplicaron la inflación del período, mientras que los registrados perdieron. De mantenerse esta tendencia, los salarios cerrarían el año casi 5% arriba en el año, pero siguen por abajo del nivel de 2023.
Según informó Indec, los salarios privados registraron subieron 2,1% en el mes y en el año acumulan un aumento del 22,9%. Los salarios públicos registrados subieron 1,9%, mucho más por debajo de la inflación, pero la variación se explicó por los aumentos en las provincias, que subieron los salarios un 2,1%, mientras que el aumento en la Nación fue de 1,2%.
En conjunto, los salarios registrados subieron 2% en el mes y en el año suman un aumento del 24%, mientras que la inflación acumula un 27,9%.
En el sentido contrario, los no registrados subieron un 4,2% y acumulan un aumento del 84,5%. Este segmento cuenta con la particularidad de que su relevamiento tiene 5 meses de rezago dado que surge de la Encuesta Permanente de Hogares y no de registros laborales.
La tendencia que se observó en la primera mitad del año, en la que los salarios ganaban contra la inflación que se encontraba en un sendero decreciente, parece verse interrumpida en el último tiempo, en especial en los salarios registrados privados.
“Respecto a noviembre de 2023 los salarios privados registrados se encuentran 0,9% debajo y los del sector público un 14,4% debajo (33,3% los nacionales y 5,5% los provinciales)”, estimó el director del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), Nadin Argañaraz.
En el mismo sentido, Iván Cachanosky, economista jefe de la Fundación Libertad y Progreso, estimó que “el sector privado no registrado sigue creciendo, pero lo ideal es que esa gente pueda pasar al sector privado formal. El sector privado registrado está un poco estancado”.
Desde el Centro de Economía Política (CEPA), agregaron que, en caso de actualizarse la canasta de consumo en base a la encuesta de consumo de los hogares de 2018 (en base a la cual se actualizará como se mide la inflación desde enero), la pérdida de poder adquisitivo de los salarios registrados entre noviembre de 2023 y octubre de 2025 es del 15%.
Respecto del caso de los trabajadores estatales nacionales, Luis Campos, investigador de la CTA Autónoma, destacó que siguen “en caída libre” y que en dos “su salario perdió un tercio del poder de compra (contra 2023, es como si este año hubieran trabajado cuatro meses gratis)” mientras que “los provinciales perdieron solo un 6,6%”.
Cómo cierra el año
La aceleración que se vio en la inflación en los últimos meses, lenta pero constante, asienta una pauta sobre el desempeño que tendrán los salarios. La inflación de 2,5% de noviembre plantea un desafío para los salarios.

“La inflación mensual en los últimos meses también fue alta; entonces está medio empardado el tema. Es lo que se viene viendo en los últimos meses: el salario empezó a recuperar rápido, pero quedó levemente por debajo del último techo relativo desde que asumió el gobierno”, subrayó Cachanosky.
Para el cierre de 2025, Argañaraz estimó que, de mantenerse la tendencia actual, los salarios privados registrados podrían cerrar con un crecimiento real del 4,9% y los públicos un 4,2% real anual, empujados por la suba de los provinciales.
Esta recuperación sin embargo mantiene al salario registrado real en los menores niveles de la década, observó Campos, quien marcó que el sector privado está 20% por debajo del promedio de 2017 mientras que los públicos están un 34% por debajo.
Hacia 2026
La expectativa por una inflación que comience con cero desde mitad de año y la recuperación de la actividad, como espera el Gobierno, alimentan la idea de que se dé una recuperación real.
Cachanosky suma en sus cálculos la posible aprobación de la reforma laboral y el hecho de que no será un año electoral, lo que ayudará a que los salarios retomen el sendero de crecimiento.
Sobre la inflación, considera que “va a ir bajando hasta que, en agosto/septiembre, llegue cerca del 1% mensual, y eso va a permitir que el salario (principalmente el del sector privado) quede más cerca del nivel que tenía antes de que se geste la crisis heredada”.
Un factor de la reforma que podría ayudar es el de la registración. Esto es porque los salarios no registrados, siendo que sus ingresos son considerablemente menores que los de los registrados, además de los sistemas de protección que contempla este esquema de contratación.


















