Empresarios apuestan por el comercio regional: el esquema para no usar dólares

Durante la ceremonia de toma de posesión de Dilma Rousseff como titular  banco de desarrollo multilateral de los BRICS -integrado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica-, el presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, reforzó su idea de reducir la utilización de dólares en el comercio internacional. 

"¿Por qué no podemos comerciar con nuestra moneda? ¿Quién decidió que tenía que ser el dólar? Necesitamos tener una moneda que haga que los países se sientan en una situación un poco más cómoda, porque actualmente un país tiene que correr detrás del dólar para exportar", señaló.

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En la última visita de Lula a la Argentina cobró impulso una opción de financiamiento a las exportaciones de Brasil a la Argentina por un monto de u$s 5000 millones.

A la espera de definiciones que puedan generar alivio frente a la limitada disponibilidad de reservas del Central, los empresarios locales encuentran apoyo en sus pares de la región, para trazar estrategias que favorezcan la integración.

"Necesitamos aproximar cada vez más nuestra producción para exportar a los mercados ricos del mundo; necesitamos trabajar juntos para conseguir mejores precios y procurar desenvolver la América latina entre nosotros", dijo José Roberto Tadros, presidente de la Confederación Nacional de Comercio de Bienes, Servicios y Turismo de Brasil a El Cronista.

"Tenemos petróleo, tierras en abundancia, gas, proteína animal, granos: tenemos todo, no obstante, no conseguimos aún superar el proceso de colonialismo que sufrimos a lo largo del tiempo", reflexionó en el marco de la de la cuarta edición de la Conferencia de Comercio Internacional (CI23) y apuntó a las "crisis políticas" como principal freno al empoderamiento del Mercosur.

El dirigente empresario brasilero fue optimista sobre los beneficios de la integración de la región con el resto del mundo, puntualmente, a partir del diálogo entre los presidentes de Brasil y la Argentina -que se había cortado durante la gestión de Jair Bolsonaro-, para avanzar con el acuerdo con la Unión Europea que quedó trunco en 2019.

Alivio bilateral

Sobre las medidas económicas que pueden generar alivio para el comercio bilateral y, principalmente sobre las importaciones de la Argentina, explicó que más allá de una asistencia económica momentaria, con un Mercosur fuerte se puede presionar incluso sobre el FMI para "suavizar" la deuda de la Argentina y con otros organismos multilaterales para mejorar el financiamiento.

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 Aunque también se habló del lanzamiento de una moneda única, el sector espera que avance con mayor celeridad una línea de crédito entre el Banco de Desarrollo de Brasil (BNDES) y el Banco Nación, que quitaría presión a la demanda de dólares al Banco Central de la Repuntica Argentina (BCRA) .  

Por las condiciones actuales de intercambio, la decisión le implicaría Brasil "quedarse con pesos", por la diferencia entre el comercio, un costo que sólo se asumirá por la decisión de Lula de "darle algo" a Alberto Fernández, en un año electoral, aseguró Tadros.  

Según datos de la CAC, pese a hilar tres meses de crecimiento en las exportaciones, en marzo, el saldo comercial entre ambos países arrojó un déficit de u$s 393 millones, desfavorable para la Argentina  

En el tercer mes del año, las exportaciones de la Argentina a Brasil avanzaron 21,7% y sumaron u$s 1184 millones, mientras que las importaciones crecieron más de 31% y restaron u$s 1578 millones.  

UE más cerca

El rol del Mercosur y el acuerdo con la UE para el desarrollo regional fue el tema central de la CI23 organizada por la Cámara Argentina de Comercio (CAC).

Rodrigo Perez Graziano, secretario de la entidad apuntó a la necesidad de superar la "debilidad" que mostró en sus 32 años la relación comercial intrabloque que se estima en torno a los u$s 40.000 millones, contra un intercambio comercial con el exterior que alcanza u$s 600.000 millones, 15 veces superior.

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En ese sentido el ejecutivo marcó que la participación del bloque en el PBI mundial representa tan sólo el 3 por ciento.

Mario Grinman presidente de la CAC, se mostró frustrado al describir que aquel "proyecto extraordinario" en la práctica "ni siquiera funciona como una unión aduanera" pero fue optimista y pidió desarrollar "una alianza latinoamericana muy fuerte, que nos permita como bloque salir a competir al mundo".

"Somos una región libre de conflictos y podemos transformarnos en un potencial proveedor de insumos que el mundo hoy está reclamando", apuntó.

Por su parte el presidente de la Comisión de Integración y Mercosur de la CAC, Carlos Restaino, dijo que hay condiciones "favorables" para que se firme este año el acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea (UE).

"La mayoría de los países industriales de Europa están de acuerdo porque en estos años de enfriamiento de las negociaciones apareció China con mucho interés en el sur de américa", dijo.

En ese sentido arriesgó que la firma sucederá durante el segundo semestre, dado que la presidencia de la Unión Europea quedará a cargo del presidente español Pedro Sánchez y la del Mercosur el jefe de gobierno de Brasil. 

Economía Real

 Sobre el margen económico que posee Brasil para auxiliar a su vecino, Tadros destacó que la economía brasileña "va muy bien" y contó que en 2022 la corriente de comercio representó 600 billones de dólares con una inflación de 5,6% anual, la mitad de lo que registraron Estados Unidos, Francia, Italia, Inglaterra, España o Suiza.  

"Nosotros teníamos 400 billones de dólares en reservas", dijo, pero marcó que Brasil exporta lo suficiente para alimentar a 300 millones de personas, pero cuenta con 30 millones de personas bajo la pobreza.

"Lula procura hoy por otras formas de asistencia social sacar a esta población de la pobreza con programa social y aumento de ingresos a través de contribuciones", destacó.

Aunque se mostró opuesta al "populismo" indicó que los empresarios comprenden que "para que todos los pueblos vivan y consuman mejor tiene que haber mejores ingresos que permitan una corriente de comercio que también le genere lucro a las empresas ".

Señales de superación

  "Todos nosotros no entendíamos por qué un país rico como la Argentina está viviendo estas crisis que parecen no tener fin: tiene petróleo, gas, costa pacífica y atlántica; es el séptimo mayor territorio del mundo y un gran productor de alimentos", dijo el referente brasilero y apuntó a las crisis políticas. 

En ese sentido, explicó la necesidad de "superar el colonialismo" tanto a nivel regional como local y apuntó a los conflictos que otras potencias generaron entre los países de la región para evitar su fortalecimiento como bloque económico. 

"La guerra de Paraguay que se juntó Brasil, Argentina y Uruguay para invadir y destruir Paraguay, fue provocada por los ingleses, porque Solano López estaba industrializando Paraguay", mencionó.

Luego recordó la guerra del Chaco entre Bolivia, Perú y Chile, impulsada por los Estados Unidos, que "querían un área muy grande del territorio de Bolivia donde tenía producción de borracha, en una época en que Charles Goodyear vulcanizó la borracha".

"Por eso -agregó-, existe este malestar permanente y Bolivia perdió la salida para el mar".

Por otro lado, rememoró la lucha contra Brasil cuando Bolivia reivindicaba parte del Estado del Acre en Brasil y el conflicto entre Argentina y Chile por el estrecho de Beagle. "Todo esto motivó este sentimiento colonialista de antagonismo, pero eso no puede existir", reflexionó.

Como señal positiva, el empresario brasilero, contó: "asistimos ahora al campeonato mundial, todos los brasileños torciendo por Argentina, y vibrando, como tiene que ser".