Cristina Kirchner y Mauricio Macri volvieron a verse las caras, tras el traspaso fallido de 2015.
La ex presidenta ingresó al recinto de la Asamblea Legislativa acompañando a Alberto Fernández y, tras la jura del nuevo Presidente, fue el turno de Macri.
En ese momento, ambos ex mandatarios protagonizaron un incómodo saludo.
Luego, se realizó la entrega de los atributos de mando y, de nuevo, sobrevino otro momento de tensión.
La flamante vicepresidenta evitó firmar las actas con la misma lapicera que utilizaron su compañero de fórmula y Macri, y le pidió a uno de sus colaboradores una propia.













