El ajuste del gasto público que comenzó en julio continúa a paso firme. En lo que va de octubre, el gasto primario cayó en términos reales tanto contra septiembre como contra el mismo mes de 2021, cruzado por la campaña electoral de medio término. El Ministerio de Economía informará este jueves el resultado fiscal base caja de septiembre, en el que se espera una fuerte contracción para cumplir con la meta de déficit primario del 2,5% pactada con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
La consultora Analytica comenzó a medir la ejecución semanal del Presupuesto. Desde julio, cuando comenzó el interinato de Silvina Batakis antes de la llegada de Sergio Massa a Economía, el gasto primero se pisó y luego continuó con una serie de recortes, que se plasmaron incluso en una modificación presupuestaria que podó partidas por $ 200.000 millones.
En la segunda semana de octubre, según Analytica, el gasto primario cayó 19,5% intermensual (contra la segunda semana de septiembre) y 24,3% anual. En la primera semana del mes, la comparación arrojaba caídas del 7,4% y del 20,5%, respectivamente.
En la segunda semana de octubre, el gasto en subsidios económicos (principalmente, a la energía) cayó 58,6% anual, los desembolsos por asignaciones familiares y AUH, 55,3%, y el pago por bienes y servicios, 43,4%. Los pagos por obra pública retrocedieron 14,3% y las transferencias a provincias, 23,4%. El pago de jubilaciones y pensiones cayó 5% y la erogación para programas sociales, 4,4%.
El gasto en obra pública cae en términos interanuales incluso con un pago fuerte a Ieasa para infraestructura energética, que explicó un incremento intermensual de 24 puntos porcentuales. Los gastos en vivienda y e infraestructura hídrica están prácticamente pisados, a niveles de apenas 7 y 14% en comparación con las ejecuciones de marzo.
Todo por la meta
Para Claudio Caprarulo, director de Analytica, "la estrategia para alcanzar el resultado fiscal será recortar en las partidas con gran participación, como subsidios y gastos en personal". La consultora proyectaba un déficit de 3,1% del PBI a mitad de año, que ahora ajustó a 2,8%. En su último staff report, el FMI reforzó que considera clave cumplir con la meta fiscal.
Según la Oficina de Presupuesto del Congreso, el gasto crecía a un ritmo de 4% real hasta agosto, mientras que los ingresos caían 0,8% (por la base de comparación alta que dejó el Aporte Solidario). Eso explicaba un aumento interanual del déficit de 32,1% real. La OPC reporta datos devengados, estén o no efectivamente pagados, mientras que la Secretaría de Hacienda informa resultados "base caja".
Pero la OPC dio cuenta de cómo se frenó el gasto desde julio. En agosto, la caída real del gasto corriente fue del 19,1% anual (contra el mes de las PASO), explicada por bajas de dos dígitos en jubilaciones, asignaciones y subsidios económicos, que se podaron hasta 46,8% en el caso de la energía. Los gastos de capital, de menos peso en la cuenta final pero claves para la actividad económica, cayeron 33,4 puntos reales.
Todavía falta
"En términos reales, si los ingresos se mantienen estables en lo que resta del año, el gasto primario debería caer como mínimo 12% interanual para cumplir con la meta FMI", estimó la consultora Equilibra, que atribuyó el freno en el gasto en subsidios a que no se devengaron pagos a Cammesa en julio. Como contrapartida, la deuda flotante trepó $165.000 millones entre mayo y agosto.
El Gobierno informará este jueves el resultado "base caja" de septiembre. La meta que ratificó Sergio Massa es cumplir con el déficit fiscal de 2,5% del PBI para el año. El mes contará con los ingresos adicionales del "dólar soja", que elevaron la recaudación del mes pasado 19% anual en términos reales. Una parte pequeña de los más de $ 400.000 millones recaudados se usará para pagar el bono a personas en situación de vulnerabilidad durante noviembre y diciembre.
