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Para muchas personas tener una dieta saludable que incluya minerales y vitaminas beneficiosas puede ser un gran desafío. Sin embargo, existen alimentos clave que pueden beneficiar el organismo.
Generalmente, las infusiones frutales pueden ser grandes alternativas para cumplir ese desafío. Es el caso del té de granada que brinda al cuerpo antioxidantes, ayuda a generar colágeno y mejorar la salud cardiovascular.
La infusión milenaria con más antioxidantes
La granada es un fruto originario de Persia que cuenta con una pulpa jugosa y tiene un sabor agridulce. Proviene del árbol granado, (Punica granatum) que es de la familia de las Punicáceas.
Desde la antigüedad, la granada es conocida por ser un símbolo de amor, vida eterna, juventud, fertilidad y muerte. Esta fruta es mencionada en la Biblia, en el mito griego de Perséfone e incluso aparece en un cuadro de Salvador Dalí.
Las propiedades de la granada
Esta fruta cuenta con múltiples vitaminas y minerales que benefician al organismo. Las más destacadas son vitamina A, vitamina C, magnesio, calcio, selenio, cobre, fósforo, sodio, zinc y hierro.
Composición química de la granada
| Valor nutricional | Por porción |
|---|---|
| Agua | 82,5 g |
| Fibra | 3,1 g |
| Proteínas | 0,7 g |
| Lípidos | 0.6 g |
| Hidratos de carbono | 16,7 g |
| Sodio | 7,0 mg |
| Potasio | 290,0 mg |
| Calcio | 8,0 mg |
| Magnesio | 3,0 mg |
| Fósforo | 17,0 |
| Hierro | 0,5 |
| Vitamina B1 | 0,05 mg |
| Vitamina B2 | 0,02 mg |
| Vitamina C | 7,0 mg |
Los beneficios de la granada
La granada tiene un sabor único y cuenta con un sin fin de nutrientes que pueden beneficiar el cuerpo humano. Algunos de los beneficios más destacados de esta fruta son los siguientes:
- Protege el corazón: comer granada puede ayudar a reducir el colesterol LDL, mejorar el estado de las arterias y regular la presión arterial. Esto puede reducir el riego de tener enfermedades cardiovasculares.
- Mejora la digestión: su alto contenido en fibra y agua mejora el tránsito intestinal, depura el organismo, y ayuda a tener una mejor digestión.
- Es antioxidante: esta fruta cuenta con más cantidad de antioxidantes que el vino tinto y el té verde. Por eso, ayuda reducir la inflamación, combatir los radicales libres y proteger a las células.
- Genera colágeno: al tener gran cantidad de vitamina C promueve la producción natural de colágeno, que mejora el estado de la piel y las articulaciones. Una sola granada cubre un 40% de lo que se necesita de vitamina C por día.
- Controla la diabetes: el consumo de esta fruta podría reducir los niveles de azúcar en sangre y ayudar a reducir la resistencia a la insulina.
- Reduce el dolor articular: los flavonoles y la vitamina C presentes en esta fruta pueden ayudar a reducir la inflamación de las articulaciones.
¿Cómo incorporar la granada en tu dieta?
Hay varias formas de consumir esta fruta, una de las más simples es preparar té de granada o un jugo. Para poder hacer la conocida infusión milenaria se debe utilizar la cáscara, que contiene los principios activos.
Los pasos a seguir son los siguientes:
- Colocar agua a hervir junto con la cáscara.
- Una vez en su punto de ebullición, dejar en fuego 5 minutos.
- Infusionar la preparación por otros 5 minutos.
- Dejar enfriar y tapar la preparación.
