Qué es el Síndrome del Impostor y cómo combatirlo
El perfeccionismo, la presión social y la falta de reconocimiento propio son algunos de los factores que contribuyen a este síndrome que tiene consecuencias dentro del ámbito laboral
El perfeccionismo, la presión social y la falta de reconocimiento son algunos de los factores que contribuyen al llamado síndrome del impostor, que tiene consecuencias dentro del ámbito laboral.
Alejandra Marcote, fundadora Aprender del Error y Autora de "Cómo transformar el Síndrome del Impostor en tu aliado", estudió la influencia de éste en el ámbito laboral. En el marco del evento de Recursos Humanos organizado por El Cronista y la revista Apertura, Marcote describió el síndrome del impostor como "una experiencia interna de duda sobre uno mismo, donde se cree ser un fraude, engañando a aquellos que confían en nosotros y cuestionando nuestra competencia".
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Además, detalló: "Esta sensación, de no ser lo suficientemente competente, está estrechamente relacionada con la autoexigencia y las creencias utópicas. En el mundo actual, las redes sociales desempeñan un papel importante en el aumento del perfeccionismo y la necesidad de mostrar una imagen de éxito constante".
En línea con esto, Marcote destacó que "la inmediatez de las redes sociales hace que parezca que todo parece lograrse rápidamente y sin dificultades, lo que contribuye a la sensación de ser un fraude. Algo a lo que deberíamos prestar más atención desde el ámbito laboral".
La fundadora de Aprender del Error dijo que este síndrome "también lleva a las personas a no reconocer sus propios logros y a atribuirlos a factores externos. Esto genera miedos constantes de no poder repetir los éxitos pasados y de que lo que se propongan no funcione".
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