Arcor invertirá u$s 27 millones para ampliar su producción en Brasil

Arcor, la mayor alimenticia de la Argentina, invertirá 26 millones de euros  (u$s 27,6 millones) para ampliar su capacidad productiva en Brasil, uno de los principales mercados internacionales del grupo de la familia Pagani.

"Arcor do Brasil aprobó un proyecto de inversión de ampliación de planta productiva. La inversión total de proyecto asciende aproximadamente a 26 millones de euros y será realizado en su mayor parte con financiamiento bancario tomado por Arcor do Brasil", informó la empresa a la Comisión Nacional de Valores (CNV), a través de una nota firmada por su presidente, Alfredo Pagani.

Consultadas por este diario, fuentes del grupo no ampliaron información, ni precisiones, sobre en cuál de las plantas brasileñas se focalizará el nuevo desembolso.

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Fundada en 1951, Arcor es el primer productor mundial de caramelos duros, el mayor fabricante de chocolates de América latina, el principal exportador de golosinas del país, de Chile y de Perú, y el grupo nacional con más mercados abiertos en el mundo: 130. 

Con 20.000 empleados a escala global, elabora 3 millones de kilos diarios de producto en 34 fábricas de la Argentina, cinco de Brasil, tres de Chile, dos de Perú, una de México y, desde el año pasado, también una en Angola (África), inaugurada tras una inversión de u$s 45 millones.

De los $ 625.082,12 millones que Arcor facturó en 2022 (casi u$s 3400 millones al cambio oficial de ese momento), los mercados del exterior representaron el  31,7% de las ventas consolidadas.

En Brasil, Arcor tiene presencia desde 1981, tras la adquisición de la Nechar Alimentos. Es su segundo mercado en volumen, después de la Argentina. En ese país, vende marcas como Tortuguita, Butter Toffees, 7 Belo, Poosh, Big Big, y las galletitas Triunfo y Aymoré, entre otras. Tiene más de 4000 empleados, con una producción superior a las 170.000 toneladas de productos, en cinco plantas: Rio das Pedras, Braganca Paulista, Campinas (las tres en el interior de San Pablo), Contagem (Belo Horizonte) y Recife.

La de Braganca Paulista, inaugurada en 1999, tras una inversión de u$s 40 millones, es considerada una planta modelo para el mercado de chocolates. Allí fabrica, por ejemplo, los Bon o Bon, los chocolates Tortuguita, los confites Rocklets, las tabletas Arcor y sus huevos de Pascua, entre otros productos.

El año pasado, la división de Golosinas y Chocolates de Arcor en Brasil facturó $ 27.046,4 millones (u$s 146,5 millones), un incremento del 10% contra 2021. La performance del negocio representó una mejora con respecto al año anterior, con incremento de ventas en volúmenes por sobre el crecimiento del mercado, consignó el grupo en su balance de ese año.  Los segmentos de golosinas con más crecimiento fueron caramelos, chicles, chupetines y productos con harinas, con las marcas Butter Toffees, 7 Belo, Plutonita, Big Big y Pacoca Arcor, respectivamente. Entre los chocolates, se destacó el crecimiento de las ventas de Tortuguita, tabletas, confitados y Bon o Bon.

En tanto, las ventas a terceros de Galletas en Brasil ascendieron a $ 24.785 millones (u$s 134,2 millones), 11,8% más que un año antes. El mercado brasileño de galletas, indicó, presentó una "leve disminución, en un contexto de alta presión sobre los costos de sus principales insumos, como harina y grasa". En ese escenario, destacó, el negocio "tuvo una buena performance, logrando un aumento en el volumen de ventas, destacándose el crecimiento de los productos de las marcas Tortuguita y Aymoré". Tortuguita continuó siendo el motor de crecimiento, apalancado por los rellenos cuadrados. "Es una marca icónica, de gran reconocimiento por parte de los consumidores en el país", la definió. Arcor destacó como hito haber alcanzdo un acuerdo con la aerolínea GOL, "para la entrega dentro de los snacks que ofrece la compañía, expandiendo las operaciones de la marca y llegando a millones de pasajeros".

Industrialmente, finalizó y puso en producción una nueva línea de galletas en la planta de Campinas, que posibilitó un aumento en la capacidad de producción, y de un depósito de almacenamiento de harina, "junto con mejoras en los sistemas industriales y upgrade de algunas línea de la planta de Contagem".

En una nota con la revista Apertura dada pocas semanas antes de dejar la presidencia de la empresa, Luis Pagani, quien lideró Arcor durante 30 años, anticipó que el foco de expansión estará en el exterior. "Continuaremos con la estrategia de crecimiento y desarrollo de nuestros mercados externos", indicó el empresario, que en abril le cedió la presidencia del grupo a su hermano Alfredo.

En el primer semestre de 2022 -último balance disponible hasta el momento-, Arcor registró ventas consolidadas por $ 481.386,9 millones, un 1,9% menos, en pesos, que en el período comparable de 2022. La facturación a clientes en la Argentina representó el 69,8%. "El principal escenario para el desarrollo de los negocios del grupo se vio afectado por el aumento de gastos y costos, la devaluación de la moneda y el efecto que la inflación produjo en el consumo y en el poder adquisitivo de la población", describió la situación de su mercado natal.