La enfermedad que podría estar envenenando tu organismo sin que te des cuenta
La hiperamonemia es una enfermedad potencialmente letal que se manifiesta cuando el ciclo de la urea no funciona correctamente. ¿Cómo evitarla?
El amoníaco es un desecho tóxico que se produce en el intestino durante la digestión de las proteínas. El hígado es el encargado de eliminarlo del organismo, transformándolo en urea, un compuesto menos tóxico que se excreta a través de la orina.
Si el ciclo de la urea no funciona correctamente, se produce una acumulación de amoníaco en el cuerpo, que puede provocar una enfermedad mortal conocida como hiperamonemia.
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La enfermedad silenciosa que podría causar la muerte en cuestión de horas
Las bacterias presentes en el intestino descomponen las proteínas en aminoácidos. Tiempo después, estos se convierten en amoníaco, un compuesto tóxico con el potencial de dañar células.
El hígado desempeña un papel crucial, ya que transforma el amoniaco en urea, un compuesto menos tóxico que se excreta a través de la orina. Este proceso consiste en tres etapas:
- Transaminación: el amoníaco se une a un aminoácido para formar el compuesto conocido como glutamato.
- Desaminación oxidativa: el glutamato se descompone, generando amoníaco y aminoácido.
- Síntesis de urea: el amoníaco y el aminoácido se combinan para formar urea.
Cuando hay disfunción en el ciclo de la urea, se genera una acumulación de amoníaco en el cuerpo, que puede provocar síntomas como náuseas, vómitos, confusión o convulsiones.
En casos severos, la hiperamonemia puede tener consecuencias mortales.
¿Cuáles son los síntomas de la hiperamonemia?
El cuadro sintomatológico varía según las características del paciente y el nivel de amoníaco en el cuerpo. Los síntomas más comunes son:
- Náuseas y vómitos.
- Letargo y confusión.
- Convulsiones.
- Coma.
En casos graves, la hiperamonemia puede provocar daño cerebral permanente o incluso conducir a la muerte.