

Cientos de jóvenes afroamericanos se enfrentaron ayer con la policía de la ciudad estadounidense de Baltimore, (Maryland) horas después de los funerales de Freddie Grey, un joven negro de 25 años, muerto hace dos semanas mientras estaba bajo custodia policial. Los manifestantes lanzaron piedras y ladrillos, destrozaron varios patrulleros, uno de los cuales fue incendiado, al tiempo que varias personas destruyeron una farmacia. Al menos siete policías resultaron heridos mientas intentaban contener el estallido de violencia con gases lacrimógenos.













