

Estados Unidos trasladó una enorme tripulación hacia el Caribe, en donde incluyó un buque lanzamisiles. De esta manera, estaría combatiendo una de las batallas más duras hasta ahora: el narcotráfico.
Dentro de su operación, las Fuerzas Armadas de Estados Unidos utilizaron su buque lanzamisiles USS Lake Erie. Se trata de una poderosa embarcación de guerra equipada con misiles Tomahawk de largo alcance y sistemas de defensa avanzada, como parte de una operación militar que apunta directamente a las costas de Venezuela.
¿Qué está pasando en el Caribe con Estados Unidos y Venezuela?
El USS Lake Erie cruzó el Canal de Panamá el 30 de agosto de 2025, en una travesía nocturna que duró ocho horas y fue observada por medios internacionales y curiosos locales, según informó DW.

Este movimiento forma parte de una estrategia más amplia del Pentágono para combatir el narcotráfico en la región, específicamente contra el Cártel de los Soles, organización que Washington vincula directamente con el presidente venezolano Nicolás Maduro.
Además del Lake Erie, Estados Unidos ha desplegado destructores de la clase Arleigh Burke, submarinos nucleares y más de 4500 marines, consolidando una presencia militar sin precedentes en el Caribe.
El ataque de Estados Unidos que encendió las alarmas
El 2 de septiembre, fuerzas militares estadounidenses atacaron una lancha rápida procedente de Venezuela, presuntamente vinculada al grupo criminal Tren de Aragua, designado como organización terrorista por el Departamento de Estado.
El ataque, que dejó 11 muertos, fue confirmado por el presidente Donald Trump, quien compartió un video del operativo en redes sociales.
Trump declaró que la acción fue una advertencia clara: "Que esto sirva como aviso para cualquiera que intente introducir drogas en los Estados Unidos".
¿Qué país está en riesgo?
La operación militar estadounidense ha puesto a Venezuela en el centro del conflicto. Washington acusa a Maduro de liderar redes de narcotráfico que amenazan la seguridad nacional de EE.UU., mientras Caracas responde con el despliegue de 15.000 efectivos en la frontera con Colombia y patrullajes con drones y buques de la Armada.
Maduro ha calificado la situación como "la mayor amenaza en un siglo" y ha advertido que Venezuela está en "máxima preparación" para defenderse.












