La Sociedad Brasilera de Dermatología (SBD) identificó a las erupciones maculopapulares y las lesiones tipo eritema pernio (EPL) como los dos síntomas cutáneos de mayor frecuencia que se hallaron en pacientes con coronavirus contagiados por la variante Ómicron.
Según el análisis publicado en la revista National Library of Medicine, éstas fueron las afecciones más notificadas "a partir de una revisión de la literatura publicada hasta la fecha", con más de 1500 papers.
"La frecuencia real de las manifestaciones dermatológicas sigue siendo incierta: puede oscilar entre el 0,2 % y el 45 %, siendo cercana al 6 % en las revisiones sistemáticas. Aunque aún no hay consenso, las erupciones maculopapulares se consideran las presentaciones más frecuentes, seguidas de las lesiones tipo eritema pernio (EPL)", apuntó el informe dirigido por Camila Arai Seque, Milvia Maria Simões, Silva Enokihara, Adriana María Porro y Jane tomimori.
En tanto los cuadros como urticaria, condiciones vesiculares y livedo, púrpura, necrosis sólo aparecieron en raras oportunidades. "El tiempo de aparición, la gravedad, la necesidad de tratamiento específico y el pronóstico varían según el patrón de presentación clínica", apunta la investigación.
Variante Ómicron: ¿Qué son las erupciones maculopapulares?
Las erupciones papulomaculares o maculopapulares son aquellas que presentan pápulas sobre una base eritematosa, más de la mitad de los casos tienen un importante prurito, y pueden durar entre 11 y 12 días.
La mayoría son generalizadas y simétricos donde se inician las máculas ligeramente descamativas. Se presentan con frecuencia asociados con la ingesta de medicamentos como la hidroxicloroquina, el lopinavir/ritonavir y la azitromicina.
Covid 19: ¿Qué es el eritema pernio?
El eritema pernio es un trastorno localizado en zonas distales como las manos y los pies, secundario a una respuesta anormal al frío por vasoconstricción prolongada, que conduce a hipoxemia e inflamación de las paredes vasculares.
Se divide en idiopático y secundario a enfermedades sistémicas. Las lesiones pueden ser únicas o múltiples, simétricas y bilaterales, y consisten en máculas, pápulas, placas, o nódulos eritemato-violáceos sobre una base edematosa; pueden ampollarse y ulcerarse, sin asociarse con síntomas sistémicos.
El diagnóstico es clínico y los estudios complementarios son útiles para descartar otras enfermedades asociadas. El tratamiento de primera línea son las medidas físicas preventivas.
