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Desde hace seis décadas diferentes corrientes psicológicas desarrollan teorías contrapuestas sobre qué es lo que hace a una persona más curiosa que otra y, hasta la actualidad, no se ha llegado a una versión única que abarque y contenga las distintas visiones.
Hasta aquí, se sabe que la curiosidad es una disposición natural y humana que lleva a los individuos a tratar de entender el mundo que las rodea y explorar nuevas experiencias.
Se describe como un impulso cognitivo, emocional e intelectual que se manifiesta en el deseo de descubrir, aprender y comprender.
Sin embargo, aunque sea un rasgo innato de los seres humanos, hay personas que se distinguen por ser extremadamente más curiosas que otras.
Luego de varios estudios, un equipo de investigadores de la Universidad George Mason, publicó en el Journal of Research in Personality, un trabajo en el que desarrollan un sistema de 5 dimensiones de la curiosidad, en vez de considerarla un rasgo único.
Curiosidad: las 5 dimensiones que la componen
- Sensibilidad a la falta de conocimiento. El saber les causa alivio. "Este tipo de curiosidad no es necesariamente agradable, a pesar de que las personas que la experimentan trabajan sin descanso para resolver problemas", explican los investigadores.
- Exploración placentera. Esta dimensión tiene la particularidad de dejarse llevar por el asombro ante determinadas características del mundo. A las personas que la experimentan les genera un estado de satisfacción y parecen vivir un sentimiento de alegría y placer.
- Curiosidad social. "Los seres humanos son animales intrínsecamente sociales, y la forma más eficaz y eficiente de determinar si alguien es amigo o enemigo es obtener información. Para ello, algunos pueden incluso fisgonear o escuchar a escondidas", detallan los científicos del trabajo.
- Tolerancia al estrés. Apunta a la inclinación para aprovechar la sensación de ansiedad que genera la novedad. Aquellos que no tienen esta cualidad ven falta de información, pero es muy poco probable que sientan la necesidad de explorar.
- Búsqueda de emociones. Asumir riesgos físicos, sociales o económicos para adquirir experiencias diferentes y complejas. "Para las personas con esta capacidad, las ganas de afrontar la novedad es algo que hay que amplificar, no reducir", explican los investigadores.
Curiosidad: qué significa y cómo se lleva en el trabajo
Una vez identificados los 5 rasgos de curiosidad y sus respectivas características, el equipo de investigación pasó al siguiente paso, que tenía como objetivo descubrir cuáles de las dimensiones descubiertas producen mejores resultados.
"Cuatro de las dimensiones (exploración placentera, sensibilidad a la falta de conocimiento, tolerancia al estrés y curiosidad social) mejoran los resultados laborales", detallan.
Los expertos aseguran que: "las personas socialmente curiosas son más efectivas al momento de resolver conflictos con sus compañeros, tienen más probabilidades de recibir apoyo social y son más eficaces para crear conexiones y compromiso en sus equipos. Suelen ser innovadores y creativos".
La exploración placentera está asociada a la experimentación de emociones positivas intensas; la tolerancia al estrés, a la satisfacción de sentirse competente y autónomo, mientras que la curiosidad social se liga con ser una persona amable, generosa y modesta.
Personas curiosas: datos que describen sus personalidades y qué esperar de ellas
Una vez completo el sistema de curiosidad y en busca de ver cómo se relacionan los individuos curiosos en sus lugares de trabajo, los investigadores de la Universidad George Mason realizaron dos encuestas.
La primera se realizó sobre 3000 personas que viven en Estados Unidos, e identificó que existen cuatro tipos de personalidades curiosas.
- Apasionados.
- Resolutivos.
- Empáticos.
- Evasivos o introvertidos.
La segunda se llevó adelante en 3000 trabajadores de China, Alemania y Estados Unidos, y descubrieron que en el ámbito laboral, la curiosidad puede tener distintos objetivos.
- Catalizar nuevas ideas.
- Inspira talentos únicos y valiosos.
- Ayuda a conseguir ascensos.
