

Es normal sentir cierta tensión relacionada con el ámbito laboral. Sin embargo, cuando el estrés laboral se vuelve crónico, puede afectar tanto nuestra salud física como emocional.
Existen pasos concretos que podemos tomar para mantener el estrés laboral en niveles manejables. Descubrí las estrategias recomendadas por expertos para prevenir el burnouty mantener un equilibrio saludable entre la vida laboral y personal.
Burnout: ¿cómo gestionar el estrés laboral?
La exposición prolongada al estrés no gestionado puede pasar factura tanto en tu cuerpo como en tu salud mental, y estudios recientes sugieren un posible vínculo entre el burnout laboral, la depresión y la ansiedad.
En un artículo del sitio especializado Healthline, los expertos recomiendan seguir estos pasos para evitar el burnout.


Cuanto más relajado estés, más productivo podrás ser: es importante tomarte descansos de pensar en tu trabajo, evitando revisar correos electrónicos laborales en tu tiempo libre o desconectando el teléfono por las noches.
Reconocer la importancia del autocuidado te ayuda a priorizar tu bienestar físico y mental. (Foto: archivo)
También podés vencer la procrastinación reservando bloques de tiempo específicos para el trabajo de concentración profunda. Tratá de abordar las tareas menos atractivas para obtener una sensación temprana de alivio que puede hacer que el resto del día sea menos estresante.
Si estás teniendo una semana de trabajo increíblemente desafiante, intentá pedirle a amigos que sean padres si pueden ayudarte con el transporte de tus hijos a la escuela en ciertos días.
Establecer límites claros en tu trabajo te ayuda a mantener un equilibrio saludable entre la vida laboral y personal. (Foto: archivo)
- Aprender técnicas de relajación: tomarse el tiempo de manera intencionada y ser consciente del entorno puede mantenerte relajado durante toda la semana. La meditación, los ejercicios de respiración profunda y la atención plena calman el estrés y la ansiedad.

- Evitar el chisme en la oficina: los conflictos laborales pueden afectar significativamente tu bienestar emocional. Tratá de evitar participar en situaciones chismosas.
- Dejar de lado el perfeccionismo: si necesitás que esa presentación quede perfecta o te encontrás trabajando horas extras perfeccionando un informe que terminaste hace días, puede ser momento de dar un paso atrás y reflexionar.
Si bien el perfeccionismo tiene algunos beneficios positivos, también puede ser altamente estresante y conducir al burnout. - Tomar vacaciones: poder desconectar o "apagar" tus responsabilidades y actividades relacionadas con el trabajo puede ayudarte a relajarte y descansar como ninguna otra cosa.
- Abordar el tema con tu supervisor: obtener apoyo de tu jefe puede aliviar significativamente los sentimientos de burnout.
Tratá de reservar un tiempo tranquilo para hablar con tu jefe y discutir calmadamente cómo te sentís abrumado por tareas desafiantes. Abordá la conversación desde un lugar de resolver el problema en lugar de simplemente quejarte.












