Se desploma el monto operado en bonos y alivia a las reservas
Los bonos soberanos AL30 y GD30, los más utilizados para dolarizarse a través de la Bolsa, registran una importante caída en sus volúmenes de operación.
La menor dolarización de carteras tras el sorpresivo resultado de las elecciones generales se refleja, además de un retroceso y calma en las cotizaciones alternativas de la divisa, en una fuerte caída en los volúmenes operados en los bonos AL30 y GD30, lo que hace que resulte mucho menos costoso para el Gobierno contener las presiones cambiarias.
La caída del volumen negociado en estos dos títulos, los más utilizados para la compra y venta de dólares a través de la Bolsa, es contundente. Durante las cinco ruedas previas a la primera vuelta electoral se operaron u$s 94 millones diarios en promedio. Después, el monto promedio se desplomó a u$s 30 millones diarios.
El dólar oficial del día después: las tres opciones que maneja el Gobierno tras el balotaje
La reducción del volumen a menos de un tercio lleva al Gobierno a intervenir mucho menos para contener la presión. En la jornada de hoy, por ejemplo, habría intervenido con unos u$s 8 millones, un monto significativamente inferior a los u$s 100 millones que utilizaba en los días previos a las elecciones, según estimaciones privadas.
Esto representa un importante alivio para las reservas del Banco Central. Sobre todo, en momentos en los que las arcas de la autoridad monetaria exhiben importantes saldos netos negativos y en los próximos días se profundizarán debido a los pagos por vencimientos de deuda que se realizarán al Fondo Monetario Internacional.
El cambio de tendencia, de acuerdo con los analistas, corresponde a una menor demanda de dólares por parte del mercado y una menor intervención por parte del Gobierno para contener las tensiones cambiarias durante el proceso electoral, aunque prevén que la operatoria tomará mayor volumen cerca de la segunda vuelta electoral.
Los altos volúmenes operados previo a las elecciones generales, de acuerdo con Nahuel Guevara, de Inviu, correspondían a la búsqueda de cobertura en moneda dura, lo que llevó a los paralelos a niveles "excesivamente altos". Pero el sorpresivo resultado electoral alivia temporalmente la presión cambiaria y, asimismo, la demanda de títulos para dolarizar carteras.
"El volumen operado no va a caer mucho más de los niveles actuales. El rango de operaciones va a seguir más o menos en los mismos de las últimas ruedas. Después, seguramente, empezará a incrementarse nuevamente cuando se acerque la fecha del balotaje", estima Pablo Repetto, jefe de investigación de Aurum Valores.
De acuerdo con Salvador Vitelli, analista de Romano Group, el cambio de tendencia está impulsado por la recalibración de expectativas, que impacta en la dolarización de carteras, como consecuencia del resultado que obtuvo Javier Milei en las elecciones generales y las nuevas alianzas políticas que está llevando adelante.
El hecho de haber quedado en segundo lugar, lejos de la expectativa que se generó tras las PASO, y el apoyo que está recibiendo por parte de un sector de Juntos por el Cambio podrían por lo menos "carpetear" la propuesta de dolarizar la economía del país, la cual generaba muchas dudas respecto al financiamiento para implementarlo y a qué tipo de cambio se haría.
Además, el último resultado electoral y las nuevas alianzas llevan al candidato libertario a cambiar su postura y mostrarse un poco más moderado y conciliador con otros partidos, lo que le daría mayor respaldo político en caso de que finalmente sea el más elegido en las urnas y asuma la presidencia del país.
Vitelli también prevé que la dinámica de la operatoria y la intervención cambiaria del Gobierno en los próximos días se mantendrá similar a la actual. Pero, en la medida en que se acerque la segunda vuelta electoral, la presión por la dolarización de carteras forzaría al Gobierno a gastar más reservas para contener el avance de la cotización de la divisa.
Compartí tus comentarios