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Escapada a la Costa Blanca: qué ver y hacer un fin de semana por el Levante español

Descubre lo mejor de la Costa Blanca, donde el sol, el mar y la historia se combinan para ofrecer una experiencia inolvidable.

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La Costa Blanca, en la Comunidad Valenciana, es el destino perfecto para una escapada de fin de semana. Conocida por sus playas de arena fina, calas escondidas y pueblos con encanto, esta región del Levante español ofrece mucho más que sol y playa. En este recorrido de dos días, podrás disfrutar de la cultura, la gastronomía y la naturaleza que hacen única a esta zona.

1. Día 1: Alicante y Altea

Comienza tu aventura en Alicante, una ciudad con un gran patrimonio histórico. Visita el Castillo de Santa Bárbara, una de las fortalezas más grandes de España, desde donde obtendrás vistas panorámicas del Mediterráneo. Después, pasea por el casco antiguo, lleno de callejuelas y edificios históricos como el Ayuntamiento de Alicante. Para finalizar el día, no te pierdas la Explanada de España, un paseo marítimo bordeado de palmeras.

Vista general de Altea desde el mar, en Alicante. (Imagen: Wikimedia Commons / Josemanuel)

Por la tarde, dirígete a Altea, un encantador pueblo conocido por sus casas blancas y sus calles empedradas. En lo más alto, encontrarás la iglesia de Nuestra Señora del Consuelo, desde donde tendrás una vista espectacular de la costa. Relájate en el paseo marítimo o disfruta de una cena en alguno de sus restaurantes, especializados en gastronomía mediterránea.

2. Día 2: Calpe y el Peñón de Ifach

En tu segundo día, visita Calpe, un destino imprescindible de la Costa Blanca. El principal atractivo es el Peñón de Ifach, una formación rocosa de 332 metros de altura que puedes escalar a través de un sendero. Las vistas desde la cima son impresionantes y te permitirán ver toda la costa. Si prefieres algo más relajado, disfruta de un paseo por la playa de La Fossa o visita las antiguas salinas, hogar de flamencos.

Además de su naturaleza, Calpe ofrece un casco antiguo lleno de historia, con calles empedradas y murales coloridos. No te olvides de probar su famosa paella en uno de los restaurantes locales antes de continuar tu ruta.

Calle del casco antiguo de Altea, con la iglesia de la Consolación al fondo. (Imagen: Wikimedia Commons / ConradMoelle)

3. Villajoyosa y su colorido encanto

Termina tu escapada en Villajoyosa, un pintoresco pueblo conocido por sus casas de colores junto al mar. Esta localidad no solo ofrece playas hermosas, sino también una rica historia que podrás descubrir en el Museo del Chocolate Valor, donde conocerás la tradición chocolatera de la zona. Pasea por su casco antiguo y disfruta de la tranquilidad de sus playas menos concurridas.

La Costa Blanca es un destino que tiene algo para todos: playas, montañas, historia y gastronomía. Un fin de semana en este rincón del Mediterráneo te permitirá descubrir lo mejor del Levante español, donde cada rincón cuenta una historia y cada plato te acerca a la esencia de la región.

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