Atención coleccionistas: estas son las monedas que podrían desaparecer definitivamente este año
La medida responde a un recorte de costes para la zona euro. Estas son las razones que dio la Comisión Europea (CE).
Un informe de la Comisión Europea (CE), reveló que las monedas de 1 y 2 céntimos de euro no circulan de manera eficiente entre los operadores económicos y tienen un alto coste económico y medioambiental. Como señaló la presidenta de la CE, Ursula von der Leyen, se trata de una actividad que "claramente genera pérdidas para la zona del euro".
Del mismo modo, informes previos ya habían señalado un "uso unidireccional de las monedas de 1 y 2 céntimos, una baja tasa de retorno a los bancos centrales nacionales y un aumento constante en su emisión".
¿Por qué podrían desaparecer las monedas de uno y dos céntimos?
La introducción del euro como moneda única europea ha sido clave en el proceso de integración europea. Desde entonces, los Estados miembros pueden emitir monedas en euros a reserva de la aprobación por el BCE del volumen de la emisión.
Según el informe de la CE "la emisión de monedas de 1 y 2 céntimos de euro ha aumentado continuamente desde 2002 y su tasa de emisión aumenta más deprisa que la de las otras monedas en euros"
De acuerdo a los datos estadísticos, "cada ciudadano de la zona del euro posee ahora por término medio 181 de estas monedas, mientras que en el momento de la Comunicación de la Comisión de 2013 cada ciudadano poseía 145". De este modo, "cerca de la mitad de todas las monedas en euros emitidas son monedas de 1 y 2 céntimos de euro".
Es por esto que la supresión de estas monedas sería una opción para abordar los inconvenientes que atrae la emisión.
¿Cuáles son las monedas que saldrán de circulación?
Por otra parte, como cada mes, un nuevo grupo de monedas saldrá de circulación. Este proceso se lleva a cabo bajo la normativa dispuesta en la ley de Regulación de la Moneda Metálica que tiene como objetivo determinar cuáles son las monedas aptas para el uso comercial y descartar aquellas que no superen el proceso de autentificación.
Conforme lo dispuesto por el organismo regulador, las monedas que saldrán de circulación son aquellas que se identifiquen en "mal estado", con fallas visibles en el dorso o el revés. Asimismo, también serán apartadas aquellas que sean constatadas como falsas.
Para ello, el Banco de España determinó la obligatoriedad de la evaluación de las monedas provenientes de las principales entidades que se dedican a la entrega de dinero al público y al acceso al crédito.
Una vez analizadas por la entidad bancaria, las monedas que se corroboren como falsas serán destruidas de forma inmediata. Por su parte, aquellas que presenten fallas serán sometidas a un proceso de desmonetización.