

Productores de frutas realizaron un tractorazo en la ruta 22, en el valle de Río Negro, para reclamar “medidas urgentes” que les permitan recuperar la rentabilidad del sector en el que, advierten, hay 70.000 empleos en riesgo sólo en lo que respecta a peras y manzanas en Río Negro y Neuquén.
Con el apoyo de la Comisión de Economías Regionales de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), productores frutícolas movilizaron el jueves pasado más de 600 tractores y maquinarias por los puentes que unen la ciudad rionegrina de Cipolletti con Neuquén.
Según CAME, los pequeños y medianos productores de todo el país necesitan “medidas urgentes” para “compensar el atraso cambiario, revertir los altos costos de producción y reducir las excesivas cargas tributarias” que, sostiene la entidad, “están llevando a la desaparición de centenares de productores del interior del país”.
Durante la movilización, los productores regalaron manzanas como medida de protesta para concientizar sobre el alto costo de producción y el bajo precio que ofrece el mercado.













