

El ex capitán de la selección argentina de fútbol Diego Armando Maradona no salió hoy solamente con una defensa a ultranza del presidente venezolano Nicolás Maduro sino que además hizo explícito, otra vez, su respaldo a una nueva candidatura de la presidenta Cristina Kirchner.
En momentos complicados en Venezuela, con un violento conflicto entre el gobierno y la oposición que ya dejó por lo menos 10 muertos, Maradona confirmó un acuerdo con la TV oficial venezolana para comentar los partidos del Mundial de Brasil junto al relator uruguayo Víctor Hugo Morales.
Al hacerlo dio un discurso profundamente chavista en el que se ofreció como “un soldado” del gobierno de Venezuela.
Pero, más allá del contrato y sus palabras, tuvo otro gesto: usó una camisa roja –el color que identifica a los seguidores el fallecido Hugo Chávez- en la que tenía cocidas una bandera venezolana sobre un hombro y una argentina sobre el otro. Y en la que se dejaban ver claras tres inscripciones bordadas: sobre el pecho izquierdo, “Maduro presidente”; y sobre el corazón, “Chávez Comandante” y “Cristina K 2015”.













