Un guiño judicial podría favorecer en votos a Espert y Gómez Centurión

La Cámara Nacional Electoral permitió a las fuerzas armadas y de seguridad movilizadas para las elecciones votar en el lugar de destino. Son unos 100.000 efectivos que el Gobierno pretende evitar que se vuelquen a espacios de centroderecha.

La Cámara Nacional Electoral dispuso que los efectivos de las fuerzas armadas y de seguridad abocados al operativo de custodia de las elecciones podrán votar en las escuelas donde sean destinados, aunque no coincida con su domicilio de residencia, y de ese modo habilitó a unos 100.000 efectivos a ejercer el derecho al sufragio, que muchos se vieron impedidos de ejercer en las elecciones de 2015.

Mediante la Acordada 32/19 firmada por los jueces Santiago Corcuera y Alberto Dalla Via, la Justicia intervino para que los gendarmes, efectivos del Ejército y de policías federales afectados al Comando General Electoral, es decir, el cuerpo de oficiales que custodia el buen desarrollo de los comicios, puedan votar, aunque solo para la categoría de presidente y vicepresidente.

Cuatro año atrás, los efectivos pidieron que se les permita votar en destino ya que muchos eran desplazados a ciudades o provincias distantes y debían dejar su lugar de residencia varios días antes, quedando impedidos de acudir el domingo a la mesa correspondiente con su domicilio. La Justicia accedió mediante otra acordada, que la cercanía de las elecciones impidió poner en práctica. 

En enero último, el presidente Mauricio Macri emitió un decreto estableciendo que los integrantes del Comando Genera Electoral podrían votar entre siete y 12 días antes de las elecciones, pero tres meses después firmó otro decreto con el que pospuso la aplicación de la medida para las elecciones de 2021. 

Sin embargo, Corcuera y Dalla Via dieron lugar a un planteo realizado semanas atrás por el general Carlos Pérez Aquino, nombrado por el Ministerio de Defensa comandante general electoral, y establecieron que "todos los agentes de las fuerzas federales subordinados al operativo" podrán sufragar "siempre que estén agregados al padrón complementario preimpreso, sin importar el lugar de domicilio".

 

Contra la voluntad oficialista

La medida resultó en un revés para el Gobierno, que desde hace meses ve su imagen desgastada entre las fuerzas armadas y de seguridad por una serie de reclamos desatendidos y promesas incumplidas

La Casa Rosada teme que esos votos se vuelquen hacia fuerzas de centroderecha, como las que encabezan el economista José Luis Espert, precandidato a presidente del frente Despertar, todavía en duda sobre su permanencia en carrera, y el veterano de Malvinas Juan José Gómez Centurión, precandidato por la alianza NOS.

Con más de 33 millones de habitantes habilitados a votar, los espacios  que "corren" al oficialismo por derecha procuran alcanzar el piso de 1,5% de los votos emitidos para sobrevivir a las PASO. Suponiendo que vote el 75% del padrón (así ocurrió en 2015) cualquier fuerza necesitará al menos 400.000 votos para llegar a octubre. El "voto uniformado" habilitado por la acordada de la Cámara representa una cuarta de este piso.

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