Mauricio Macri presentó esta mañana un escrito en el marco de la causa en la que se investiga un presunto espionaje ilegal durante su gobierno a los familiares de las víctimas del submarino ARA San Juan y apeló la prohibición de salir del país. El ex presidente había sido citado a declaración indagatoria para el próximo 20 de octubre por el juez federal subrogante de Dolores, Martín Bava.

El ex mandatario, que se encuentra en el exterior, nombró como abogados a Jimena Pisoni y Pablo Lanusse, ex interventor federal en Santiago del Estero.

El escrito, según consigna Télam, detalla que "pese a encontrarme fuera del país, como era y es de público conocimiento, vengo en tiempo y forma a presentarme en autos, sin que ello signifique reconocer ni consentir en el Sr. Juez las garantías que me confieren los artículos 18 de la Constitución Nacional y 8 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos".

A continuación, aclara que lo hace "convencido de mi absoluta inocencia en los supuestos hechos que se me pretenden atribuir y como derivación de mi respeto y sujeción a las instituciones de la República".

Sobre la prohibición de salida del país dictada por Bava, Macri considera que "carece de todo tipo de fundamentación, y por ende aniquila y vulnera los derechos, principios y garantías de defensa en juicio, debido proceso, mínima intervención estatal, libre circulación y tránsito, principio de inocencia, proporcionalidad y razonabilidad".

Incluso, agrega que en la citación a indagatoria, el juez "omitió todo fundamento que explique las razones y el proceso lógico que lo condujo a disponer mi prohibición de salida del país".

"Vivo con mi familia y desarrollo públicamente mi actividad política", añadió Macri, por lo que, según su criterio, "la decisión de disponer mi prohibición de salida de país resulta entonces huérfana de toda fundamentación relacionada a mi persona y situación, lo cual conculca los derechos, principios y garantías que me amparan y que informan el debido proceso y la defensa en juicio".