

Todavía no transcurrió una semana del fatídico mediodía del 25 de noviembre. Ese día quedó marcado a fuego en la inmensa legión de “maradonianos de diferentes culturas, etnias y religiones esparcidos por todo el planeta. Una catarata incesante de fotografías, opiniones, reportajes, videos con goles, homenajes y mensajes de condolencias inundaron el espectro.
Desde la aparición del hematoma subdural hasta su velatorio en la Casa Rosada, todo el hilo secuencial parece extraído del mejor cine neorrealista italiano tras la Segunda Guerra mundial. El llamado “funeral del millón de personas fue acordado entre la Presidencia de la Nación y la familia del “DIEZ , anunciándose un “estricto protocolo sanitario .
El presidente Alberto Fernández posteó una foto abrazado al ídolo y escribió en Twitter: “Nos llevaste a lo más alto del mundo. Nos hiciste inmensamente felices. Fuiste el más grande de todos. Gracias por haber existido, Diego. Te vamos a extrañar toda la vida.

Diego Maradona y Alberto Fernández
Con el correr de las horas la mítica Avenida de Mayo comenzó a llenarse de rostros cubiertos por el rojo llanto. Una multitud en paciente peregrinación olvidó las medidas de distanciamiento social a causa del Covid-19 durante más de 12 horas.
En ese almácigo humano se respiraba de nuca en nuca y aumentaba en largo cada minuto hasta que irrumpieron los barrabravas. A partir de ahí, se generó una trifulca con la policía: se derrumbaron barreras de contención, se tiraron piedras, palos y balas de goma para frenar el avance. Después de las 16 horas (hora límite del velorio), una turba de fanáticos tiró abajo los últimos vallados e irrumpió a los empujones en el “patio de las palmeras de la Casa Rosada.
Según comentó el periodista Fernando Niembro en el programa La Noche de Mirtha (El Trece): “La barra pensaba llevarse el féretro de Diego. Él se merece el mejor de los altares pero sabíamos que había un grupo de violentos que se iba a querer adueñar de la situación. Querían llevarse el féretro a pulso hasta el cementerio .
Al gran director Vittorio de Sica, quien nos legó entre otras antológicas películas: “El limpiabotas (1946) y “El ladrón de bicicletas (1948), dos joyas del neorrealismo italiano premiadas con el Oscar de la Academia de Hollywood, se le adjudica la frase:“La Biblia enseña a amar a nuestros enemigos como si fueran nuestros amigos, posiblemente porque son los mismos.
“No me gustan las estatuas, yo quiero que me embalsamen y exhiban
Según el abogado Matías Morla, esa expresión pertenece al “DI0S nacido en Villa Fiorito. Según Infobae.com, en fecha 13 de octubre firmó por escrito su deseo post mortem ante un Escribano Público: “Yo, Diego Maradona, en uso de mis facultades, quiero dejar expresada mi voluntad para el día de mi muerte, que es que me embalsamen y me exhiban .
Según la autopsia preliminar realizada, el excapitán de la Selección Argentina campeona del Mundo en México 1986 murió de una “insuficiencia cardíaca aguda en un paciente con una miocardiopatía dilatada, insuficiencia cardíaca congestiva crónica que generó edema agudo de pulmón .
El hecho ocurrió en una residencia del barrio privado San Andrés, ubicado en Benavídez, Partido de Tigre, donde fue alojado tras la intervención quirúrgica en el cráneo. Un psicólogo y un psiquiatra lo vieron sin vida en su dormitorio. En un informe de la Fiscalía General de San Isidro se señala que en el domicilio se hallaban Jony Espósito (su sobrino), su asistente (Maxi Pomargo), un empleado de seguridad, una enfermera y una cocinera.

El Dr. John Broyad dispuso la integración de un grupo de trabajo con los Agentes Fiscales Patricio Ferrari, Cosme Iribarren y Laura Capra para que coordinaran las diligencias del caso. El curso de la investigación es supervisado por el Procurador General de la provincia de Buenos Aires, Dr. Julio Conte Grand. Interviene el Juez de Garantías de San Isidro, Orlando Díaz.
Tras los allanamientos efectuados este domingo en la casa y el consultorio del médico neurocirujano Leopoldo Luque, se secuestró un teléfono celular, tablets, notebooks y la historia clínica que consta en unas 100 páginas. Estas diligencias fueron ordenadas luego de las declaraciones testimoniales de las hijas Dalma, Gianinna y Jana Maradona. La causa por el momento está caratulada como “averiguación de homicidio culposo y abandono de persona .
Consultado Luque, el médico personal hasta su deceso apuntó: "Son procedimientos legales que desconozco y no voy a cuestionar. Yo estoy a disposición de la justicia. Sé lo que hice y cómo lo hice con Diego y por Diego hasta último momento. Y puedo mostrar y contar todo".
En diálogo con La Nación, el Dr. Luque amplió: "Hablan del entorno, pero el supuesto entorno hacía lo mejor para él. Diego quería una vida, pero que era mala. Yo hace rato lo veía triste y se estaba castigando, pero no lo iba a permitir porque era un amigo. Extrañaba mucho a sus papás".
Sobre su actuación como neurocirujano aclaró: "Yo si de algo soy responsable es de amarlo, de quererlo, de extenderle la vida y de mejorársela hasta lo último."
Días pasados, el Dr. Alfredo Cahe, exmédico de cabecera, declaró tras visitarlo en la Clínica Olivos: “No me pareció lógico que le den el alta tan rápidamente, tendría que haber permanecido más tiempo. Y tras la triste noticia agregó: “Maradona falleció de una manera insólita. Tendría que haber estado un médico permanentemente en la habitación de Diego.
Quien lo ayudara durante su recuperación en Cuba confesó: “Diego estaba muy triste. Estaba con una profunda depresión. Una de las personas más allegadas a él me dijo que Diego le había dicho que estaba profundamente angustiado, que ya había hecho todo en su vida. Esa expresión no me gustó.
La incomunicación con Dalma y Gianinna: el entorno
En junio pasado, Dalma denunció en las redes que no podía comunicarse con su padre porque le habían cambiado el número de teléfono. "Estoy enfurecida. Viene el día del padre y quieren que esté al lado, y yo no lo voy a permitir. Como ellos quieren cuidarse de lo que se dice en los programas, yo no me voy a callar. De un día para el otro yo no me pude comunicar más con él. Empieza a hablar con Gianinna o conmigo y mágicamente el número cambia. Mi papá no me da plata, yo no necesito nada de él, lo único que quiero es hablar con él para que vea a su nieta", señaló en diálogo con el programa Intrusos por América TV.

Dalma, mostrando una foto abrazada a su padre cuando era ídolo del Nápoli, escribió en Twitter: "Y a vos te deseo un feliz día, todo el amor del mundo y que puedas abrir los ojos".
En poco tiempo se iniciará el proceso sucesorio. “El Diego tiene cinco hijos reconocidos y otros seis en juicio de filiación para convertirse en herederos. Seis de ellos nacieron en Argentina, uno en Italia y los cuatro restantes en la isla de Cuba, donde permaneció entre el 2000 y 2005 bajo tratamiento prolongado por sus adicciones.
Miguel Di Lorenzo, más conocido como “Galíndez , histórico ex utilero de Argentinos Juniors y de la Selección Argentina, en diálogo con el periodista Andy Kusnetzoff para el programa Podemos Hablar (Telefé), visiblemente emocionado cuestionó al entorno: "¿Cómo lo van a dejar solo? Por más que él no quiera, le tenían que decir “usted, venga acá, soy la doctora, tome la pastilla . ¿Cómo puede ser que no le dieran la pastilla? No me jodas, lo dejaron morir. Se fue a la cama solo .
También contó lo sucedido cuando intentó visitarlo: “Cuando iba a ver a Diego me decían: “Galíndez, él está durmiendo, no se puede . Cuando lo operaron de la rodilla en la Clínica Olivos también me dijeron: “Diego está durmiendo . Cuando fui a verlo a Mar del Plata me colé y entré, porque si tenés que preguntarle a alguien para verlo, pasa algo: o no le dicen por temor a molestarlo, o directamente te dicen “Diego no puede y chau.
Un "Dios" terrenal, prisionero de sí mismo
Al periodista francés Florent Torchut, (France Football y L'Equipe), se le atribuye el último reportaje por video llamada en la carrera del “10 . Así, sintetizó su experiencia: “Le pregunté qué iba a recordar de su carrera. Me dijo que lo más importante para él fue hacer feliz a la gente. Estar bien con la pelota en una cancha de fútbol y de regalarle a la gente esa magia que tenía, a la gente en el estadio y en la televisión. Me dijo que su orgullo más grande era haber hecho feliz al pueblo argentino".
Para el periodista y uno de sus biógrafos Ernesto Cherquis Bialo: “Existen muchos Maradonas. Pero hay dos insuperables: el del primer scudetto en Nápoli y el de México de 1986. Después no le fue bien, Barcelona no es para alguien que viene de Villa Fiorito. En Barcelona jugó al fútbol, en Nápoli fue feliz, que no es lo mismo. El que murió fue un jugador de fútbol, que le deja lugar ahora al segundo Gardel. Argentina tiene un nuevo mito.
Para el escritor Eduardo Galeano: “Maradona llevaba una carga llamada Maradona, que le hacía crujir la espalda desde el lejano día en que la multitud había gritado su nombre por primera vez. No había demorado en darse cuenta de que era insoportable la responsabilidad de trabajar de dios en los estadios, pero desde el principio supo que era imposible dejar de hacerlo. Necesitaba que lo necesiten. Le dolían las piernas, no podía dormir sin pastillas .

La muerte suele venir acompañada de un halo benévolo que pasa al olvido muchos pecados. Un día dejó el humilde barrio obrero donde vivía y se convirtió en un “Dios que profetizaba con una pelota en los pies. La fama ganó la pulseada y el futbolista fue su prisionero. Su intensa vida cotiza el doble que su edad biológica. Tan inhumano desgaste le hizo una mala jugada en cuerpo y alma.
Podemos imaginar que decidió hacer su propio balance cuando jugaba en tiempo adicional. Estaba solo en la habitación cuando pensó que el partido había llegado a su fin y era hora de partir. Se despojó de sus afectos y sintió que entraba en un sueño muy profundo. Unos segundos antes, no dudó y le ordenó a su mágica zurda que dejara de gambetear y hacerle goles a la muerte.
El último ilusionista del fútbol ya late en el corazón de cada niño que juega con la pelota, esperando otra oportunidad.














