
Creevy jugaba en los Worcester Warriors de Gran Bretaña cuando recibió la propuesta que sabía que estaba pronta a llegar. Tenía una interesante oferta de un club de Irlanda, pero desde la Argentina lo convocaban para ser el primer jugador en dar la vuelta e incorporarse al naciente plantel profesional de Jaguares, la primera franquicia profesional del país que compite en el Súper Rugby, que el próximo 18 de marzo tendrá su primer capítulo local (ver calendario del torneo al pie de esta nota).
No fue fácil tomar la decisión: su esposa, Virginia, estaba pasando por un buen momento profesional en la tierra inglesa. “Ella no quería volver todavía: había logrado insertarse y tenía un trabajo con el que estaba feliz. Pero yo sabía que, si no volvía, no podía jugar en la Selección por estar en otro hemisferio. Si me quedaba allá iba a perder todo tipo de motivación. Yo vivo para jugar en Los Pumas. Le dije: ‘Esto dura poco, hay que disfrutarlo’, porque soy conciente de que la carrera de jugador no es para siempre , asegura el actual capitán de Los Pumas y Jaguares.
De los 30 partidos que en 2016 disputaron los dos equipos argentinos, Creevy apenas se perdió cuatro. Los resultados, en ambos casos, no fueron los esperados, pero hoy ya está de nuevo metido en el calendario, con objetivos renovados. “Empezamos con entrenamiento de alta intensidad. Pero, antes de eso, el primer día, tuvimos una charla de grupo, como puede haber en cualquier empresa, sobre las fortalezas, las debilidades y los aprendizajes que tuvimos el año pasado. Los errores te llevan a hacer un balance completo. Como grupo, coincidimos en lo que queremos para este año. Recién ahí salimos a la cancha , cuenta.
Creevy fue elegido embajador de Assist Card, por ser "ejemplo de liderazgo y confianza". Protagoniza #YoMeAnimo, una campaña que invita a que "los viajeros salgan de su zona de confort y se atrevan a romper sus propios límites".
La temporada 2016 fue la primera de Jaguares, y no cumplió las expectativas. Decís que hoy hay una sintonía en las metas, ¿cuáles son?
Hablamos, primero, de no ponernos objetivos en cuanto a partidos ganados ni resultados. Buscamos encontrar nuestro juego como equipo y aprender a llevar el profesionalismo, algo nuevo en la Argentina. La convivencia de todos los días es un aprendizaje: si un grupo no funciona bien o tiene problemas internos, explota y no puede tener un objetivo común. No queremos desesperarnos, decir que vamos a ser campeones, porque no lo sentimos así. El año pasado, antes de arrancar, escuchamos a entrenadores de equipos de Nueva Zelanda, Australia o Sudáfrica decir que éramos candidatos porque teníamos el mismo equipo que Los Pumas. Eso nos mareó, nos hizo creer que realmente podíamos y, la verdad, faltaba mucho. Nuestro objetivo principal es aprender de los errores del año pasado y mejorar, con la disciplina.
Te eligieron capitán de los dos equipos. ¿Fue fácil cambiar el chip para asumir el rol de líder?
Fue un camino duro. Venía de cuatro años de jugar muy poco: con Tati Phelan como entrenador, iba al banco. Cuando llegó, Daniel Hourcade me dijo que quería que fuera el capitán. Le pregunté cómo quería que lo encarara y me dijo que no tenía que cambiar: “Si sos de otra manera, no va a funcionar. Me gusta tu forma de liderar, más tranquila . Había sido capitán en Juveniles, en Pampas, y Phelan me había puesto dos partidos de capitán, pero no es lo mismo. Tenía miedo, alegría y dudas por lo que iban a decir.
¿A qué resistencias internas te enfrentaste?
Había jugadores más consagrados... Por ejemplo, Corcho Fernández Lobbe era mi capitán y yo pasé a ser el suyo: fue algo fuerte. Nos sentamos, hablamos, nos pusimos de acuerdo. Les comenté lo que me gusta, como el tema de las redes sociales, porque antes estaban más cerrados: yo quería llegar a la gente, compartir, mostrar que además de jugadores de rugby somos personas normales. También sacamos las multas por llegar tarde, no es mi forma. Tengo un grupo que me respalda, porque un capitán se hace entre todos, no solo. Al principio me costó, era raro dar arengas. Fernández Lobbe me dio una mano gigante: puso al equipo por encima de él y no tuvo rencores, se quedó jugando. Ahora ya estoy asentado, pero no me creo que las sé todas porque cada día hay un problema distinto, como puede pasar en una familia o una empresa.
Con la falta de buenos resultados aparecen las críticas. ¿Tu fórmula para enfrentarlas?
Trabajando. No escucho lo malo ni lo bueno. Es importante porque, si atendés un solo lado, estás en un grave error. Hay que escuchar a los que realmente te quieren y te dicen la verdad. A veces es duro: sé que no ganamos un partido el año pasado con Jaguares, que no nos fue bien. Mi familia me vive cargando, en el buen sentido, y yo me río porque es así. Ya van a venir momentos mejores. Estamos convencidos de que, por este camino, en un futuro le podemos ganar a los All Blacks, jugar de igual a igual con Sudáfrica, con Australia. No estamos a su nivel pero nos acercamos. Vamos a seguir por ahí.
Calendario Jaguares 2017
En los partidos de la temporada 2017, que comenzaron el 25 de febrero y se extenderán hasta el 5 de agosto, y donde Jaguares dispute como local en la Argentina, el torneo se denomina Personal Súper Rugby y se celebra en el estadio de Vélez Sarsfield, con el siguiente cronograma de 8 fechas:
18/3 – JAGUARES VS CHETTAHS
25/3 – JAGUARES VS REDS
29/4 – JAGUARES VS SHARKS
6/5 – JAGUARES VS SUNWOLVES
13/5 – JAGUARES VS FORCE
27/5 – JAGUARES VS BRUMBIES
30/6 – JAGUARES VS KINGS
Del 21 al 22 de julio se disputarán los cuartos de final, el 28 y el 29 de Julio las semifinales y la final tendrá lugar el 5 de agosto.
La versión original de esta entrevista fue publicada en la edición 187 de Clase Ejecutiva, la revista lifestyle de El Cronista.














