

En muchos hogares existe un producto de uso diario que esconde un detalle sorprendente: en su interior contiene oro de 22 quilates. Aunque pasa inadvertido en la rutina, este metal precioso cumple una función esencial para garantizar su durabilidad y rendimiento.
Este hallazgo convierte a un artículo tan común como el que está en el baño en una pieza con un valor inesperado. No se trata de lujo ni de decoración, sino de un componente técnico que utiliza oro para asegurar el correcto funcionamiento de su tecnología interna.

¿Qué producto del baño contiene oro de 22 quilates?
El artículo en cuestión es el cepillo de dientes eléctrico, cuyos circuitos internos utilizan placas con acabado ENIG (Electroless Nickel Immersion Gold). Se trata de un recubrimiento con oro de 22 quilates que protege las conexiones en un entorno húmedo y expuesto a químicos como la pasta dental.
Aunque la cantidad de oro es mínima en cada unidad, se estima que la suma de miles de dispositivos puede acumular un valor de miles de dólares. El uso de este material no es casual: se aplica como recubrimiento, ya que en forma maciza resultaría demasiado costoso.
Propiedades clave del oro en los cepillos eléctricos:
- Protección frente a la corrosión y la humedad.
- Mayor conductividad eléctrica en los contactos.
- Durabilidad frente a vibraciones constantes.
- Estabilidad en condiciones químicas adversas.

¿Por qué se usa oro y cuánto vale hoy en día?
El oro de 22 quilates en los cepillos eléctricos garantiza el funcionamiento de componentes críticos como sensores de presión, temporizadores y gestión de la batería. Gracias a su conductividad y resistencia, estos dispositivos ofrecen un rendimiento estable a lo largo de los años.
Al 22 de agosto de 2025, el precio del oro de 22 quilates alcanzaba USD 3.334 por onza troy, lo que equivale a USD 107,17 por gramo. Esta cotización refleja por qué, incluso en recubrimientos delgados, el oro sigue siendo la opción más confiable para la industria tecnológica.
Beneficios de usar oro en la electrónica:
- Garantiza conexiones seguras y duraderas.
- Mantiene el rendimiento aun en condiciones extremas.
- Aumenta la vida útil de los dispositivos.











