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Si eres fanático de las papas pero buscas una alternativa más saludable y sin aceite, esta receta es todo lo que necesitas.
Sin freidora, sin horno y lista en menos de 20 minutos, esta preparación te permite disfrutar de unas papas crocantes y livianas, ideales para acompañar cualquier plato o como snack saludable.
Cómo hacer papas crocantes en sartén sin una gota de aceite
Para lograr una textura dorada y crocante, el truco está en la técnica. Primero, elegí papas firmes y lávalas bien. Puedes pelarlas o dejarlas con cáscara para un toque rústico. Luego, córtalas en bastones finos o rodajas delgadas: cuanto más finas, más crocantes y rápidas de cocinar.
Hiérvelas durante 5 a 7 minutos en agua con sal, solo hasta que estén semi cocidas.
Escúrrelas y seca bien con papel absorbente o un paño limpio.
Calienta una sartén antiadherente a fuego medio-alto. No agregues aceite.
Cocina las papas en una sola capa. Dóralas de ambos lados durante algunos minutos.
Una vez cocidas, condimenta al gusto: sal, ajo en polvo, pimentón, orégano o lo que prefieras.
El resultado son unas papas doradas, crocantes y sin grasas. Y lo mejor: no necesitas horno, no usas aceite y no ensucias toda la cocina.
¿Por qué hacer papas en sartén es mejor que al horno?
Menos tiempo de cocción: en sartén están listas en minutos, mientras que al horno pueden tardar más de 40.
Sin grasas añadidas: al evitar el aceite, esta receta es ideal para quienes siguen una alimentación saludable o baja en calorías.
Sabor natural: las papas conservan su sabor puro, y los condimentos se destacan más.
Textura perfecta: crocantes por fuera, suaves por dentro, sin necesidad de freírlas.
Cero complicaciones: con una sola sartén, tienes un resultado delicioso y sin ensuciar el horno.
Si usas unos 300 gramos de papas, esta receta aporta entre 210 y 240 calorías, según el tipo y corte elegido. Es una opción ideal para disfrutar sin culpa, rápida, económica y sin renunciar al sabor.
