

Dejar de consultar la opinión del trabajador, prescindir de él en nuevos proyectos y restringir el acceso a la información son algunas de las señales que las empresas dan cuando van a echar a un empleado.
Los datos se desprenden de la última encuesta de Bumeran'Red flags, señales de que están por despedir', en la que participaron 336 profesionales de Recursos Humanos de la región: 113 de la Argentina, 38 de Chile, 92 de Ecuador, 52 de Panamá y 41 de Perú.
En el estudio, que exploracómo actúan los especialistas cuando van a desvincular a un talento, el portal online de empleos planteó distintos interrogantes como: ¿Dejan de sumarlo a nuevos proyectos? ¿Le dan tareas más difíciles? ¿Limitan su acceso a la información?. Así, los expertos revelan indicadores que dan cuenta de que podría aproximarse un despido.
Las señales que dan las empresas antes de un despido
En el caso de los profesionales argentinos, una vez que tienen la decisión tomada, el 52% de ellos restringe el acceso a la información de la persona que va a despedir, frente a un 48% que asegura que no toma esta determinación.
En cuanto a los avisos institucionales y considerados importantes, el 85% de las compañías relevadas afirma que le sigue enviando información a la persona que va a dejar la empresa, mientras que solo un 15% decide no hacerlo.

¿Y qué pasa con los eventos o los nuevos proyectos que surgen dentro del último periodo laboral del colaborador que se va a despedir? El 65% de las organizaciones deja de invitar al talento a conferencias, congresos y viajes laborales frente a esta situación, mientras que el 35% continúa invitándolo a estas actividades, más allá de tener la decisión tomada.
Además, el 82% de los especialistas de Recursos Humanos también deja de sumar al empleado a los nuevos proyectos que aparecen en la compañía, mientras que el 18% sigue teniendo en cuenta la participación de la persona que va a dejar de formar parte de la empresa.
Sin embargo, si se trata de reuniones en las que el trabajador solía participar habitualmente,el 65% de los encuestados de Recursos Humanos del país sigue sumando al empleado, mientras que el 35% deja de invitarlo.

En el resto de los países de la región la situación cambia: solo los argentinos y los chilenos continúan sumando mayoritariamente al talento a los encuentros en los que solía estar, dado que los ecuatorianos y los peruanos hacen lo contrario, mientras que los panameños responden a ambas opciones por igual.
Por su parte, el 59% de las firmas de la Argentina deja de consultar la opinión de la persona sobre decisiones importantes de su área, mientras que el 41% de los encuestados sí contempla los aportes del empleado. Esto quiere decir que casi seis de cada 10 dejan de considerar dentro de las decisiones relevantes los comentarios de quien va a dejar la empresa.
En los países de la región la respuesta es similar: el 71% de los headhunters ecuatorianos de Recursos Humanos deja de consultar la opinión del talento sobre las decisiones importantes de su área, en Perú lo hace un 61%, en Panamá el 60% y en Chile el 45%.
El 59% de las empresas de la Argentina deja de consultar la opinión de la persona sobre decisiones importantes de su área.
Si bien mayoritariamente los reclutadores optan por dejar de consultar la opinión del talento sobre decisiones importantes de su área una vez que la decisión está tomada, en el caso de situaciones por fuera de decisiones relevantes para el sector el 70% tiene en cuenta los aportes del empleado que dejará la organización. En cambio, hay un 30% que en este escenario tampoco considera su opinión.
Sin embargo, el 47% de los encuestados argentinos asegura que la comunicación con la persona es cada vez menor, mientras que el 34% considera que es mayor para ver si se puede solucionar el panorama y el 19% sostiene que es igual.
El trato hacia el empleado y sus tareas antes de su despido
En cuanto al trato con la persona que se va a despedir, en contra de varios de los mitos que existen sobre los despidos y la manera de actuar frente a esta situación, el 65% de los profesionales argentinos asegura que no cambia la forma en la que se trata al talento y que sigue siendo la misma hasta el final, en tanto el 35% responde que sí es diferente.
En comparación con los otros países de la región, la Argentina concentra el mayor porcentaje de especialistas en Recursos Humanos que respondieron que no modifican el trato con el empleado. Le siguen Perú con el 54%, Panamá con el 52%, Chile con el 50% y Ecuador con el 45%.
La Argentina concentra el mayor porcentaje de especialistas en Recursos Humanos que no modifican el trato con el empleado.
Además, el 54% de los especialistas del país asegura que frente a esta situación, no se modifica el vínculo con sus compañeros, aunque el 34% considera que si las personas de su equipo lo saben, es posible que cambie el trato; mientras que el 12% sostiene que es inevitable que no lo traten de una manera distinta a la habitual.
De igual modo, el 48% de los encuestados de la Argentina asegura que el talento mantiene las mismas tareas hasta su último día en la compañía, aunque el 42% le da cada vez menos responsabilidades, el 8% las cambia y solo el 2% brinda mayor caudal o profundiza su complejidad.
En ese sentido, el 52% de los encuestados del país empieza a asignar sus responsabilidades a otros compañeros, frente a un 48% que mantiene las tareas del empleado hasta su último día laboral en la empresa.

A su vez, el 51% de los especialistas de la Argentina sostiene que a pesar de ya tener la decisión tomada, su trabajo es corregido de la misma manera, el 27% afirma que casi no se le corrige, y el 22% profundiza las correcciones e incluso le llama la atención.
En relación a la dificultad de las tareas, el 89% de los profesionales argentinos asegura que cuando están por despedir a alguien no le da a la persona tareas de difícil resolución para tener argumentos para echarla, mientras que el 11% sí elige complejizar su trabajo por ese motivo.













