La importancia de saber hacer RCP y por qué debería convertirse en un deber ciudadano
El 70% de las muertes por paros cardiorrespiratorios ocurren por fuera de los hospitales. La CEO de la empresa líder en urgencias médicas, dialogó con El Cronista sobre la necesidad de concientizar y capacitar a la población.
"Salvar vidas es algo colaborativo", sostiene Mariela Waisbord, quien ejerce como CEO de Vittal desde 2015. La empresa líder en urgencias y emergencias médicas extrahospitalarias incorporó nuevos servicios y capacitaciones para que la atención sea cada vez más inmediata y eficiente.
Una de ellas es la democratización de los conocimientos de la Reanimación Cardiopulmonar (RCP), del uso de desfibriladores y los primeros auxilios, así como también una fuerte incorporación de la telemedicina. "Es muy alta la probabilidad de salvar vidas con la intervención de estas herramientas", remarca Waisbord, en diálogo con El Cronista.
La importancia del RCP y los primeros auxilios
Lo cierto es que, tal como explicó, "hay muy poco porcentaje de la población que está capacitada" para realizar este tipo de prácticas en un caso de emergencia. Mientras que en paralelo, de las 40.000 muertes que ocurren al año por un paro cardiorrespiratorio, un 70% suceden fuera de los hospitales.
En este marco, Vittal da cuenta de la importancia de llevar sus cursos y capacitaciones a los diferentes ámbitos educativos, laborales y sociales. "Realmente cambiaría mucho si nosotros pudiéramos concientizar y que de a poco se convierta en un deber ciudadano", expresa Waisbord.
"Son conocimientos que deberíamos saber. No esperar a que deba intervenir un tercero, porque en la primera maniobra es mucho más probable que esté cerca alguien de la población civil y no un experto", detalló la empresaria a cargo de la compañía.
Además, tras llevar adelante un trabajo conjunto con empresas e instituciones estatales, confirmó que las capacitaciones siempre son "muy enriquecedoras". "Es como tener un botiquín de emergencias. La gente se queda más tranquila, se siente capaz de poder ayudar a alguien en una situación así", manifestó Mariela.
En el último año, la empresa médica duplicó la cantidad de instalaciones de desfibriladores externos automáticos (DEA) en diferentes instituciones, en relación a 2022.
El DEA es un dispositivo electrónico portátil que analiza, diagnostica al paciente y puede lograr restablecer el ritmo cardíaco cuando una persona sufre un paro. Es decir, salva vidas.
Mientras que, tal como explicó la empresaria, el Gobierno lanzó una iniciativa para que "no se penalice a aquel que intente reanimar a una persona, por más que no sepa exactamente cómo".
"El peor escenario es que esa persona se va a morir, y lo que podemos hacer con un RCP, por más que no sea el más capacitado, es salvarle la vida", insistió.
El antes y después en la telemedicina
La virtualidad que trajo la pandemia provocó un giro drástico en la atención médica. En una primera instancia, de forma obligatoria. Actualmente, como una posibilidad de mejorar, ampliar y democratizar el sistema de sanidad con el fin de potenciar los cuidados.
"Las plataformas llegaron y realmente se trata de eficientizar la salud desde ese lado. Se trata de preservar a los profesionales. Que ese médico ahorre en traslados, pueda realizar recetas de manera digital y a la vez atender a más personas en un corto lapso", explicó la magister en negocios.
Desde Vittal cuentan con diferentes planes que les permiten a sus afiliados poseer una consulta inmediata de forma online, en donde sea que se encuentren. Además, mantener un seguimiento de su tratamiento sin la necesidad de trasladarse a un centro médico.
Según detallaron desde la compañía, actualmente, alrededor de un 50% de las consultas se realizan a través de la telemedicina. "En el último tiempo se redujo la cantidad de videollamadas, pero esa cantidad son más efectivas. Los médicos saben qué patologías se pueden resolver allí y cuáles requieren de presencialidad", especificó.
Entre ambas formas de atención, la empresa posee la mayor cobertura geográfica en todo el país, a través de la cual le permite realizar una atención de 1 millón de auxilios anuales y alrededor de 2700 atenciones diarias.
La misión y la adrenalina de salvar vidas
Mariela Waisbord asumió el compromiso de dirigir la empresa familiar en 2015. "Vittal fue fundada por mi padre y desde muy chica está muy presente en mi vida. Mi papá sufrió un accidente cuando yo era muy chica y eso lo despertó a analizar el sistema de salud en su momento", contó la CEO.
Durante toda su carrera como profesional, ella se especializó en economía, marketing y negocios. "De alguna manera fue mezclar los dos mundos, la historia familiar con lo que a mi me gustaba que era la parte de administración de empresas y de liderar equipos", relató sobre su llegada.
"La misión de Vittal de salvar vidas es algo de mucha responsabilidad. Es una industria que aporta mucho a la población y socialmente me gusta", destacó la especialista y sostuvo que es un trabajo que le implica estar conectada las 24 horas de los 365 días del año.
En este sentido, enfatizó que toma su trabajo como "una vocación". "Al equipo de Vittal le gusta, porque esta adrenalina forma parte del ADN de cada uno", sentenció.
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