En plenas vacaciones de invierno, advierten que 60 aviones podrían dejar de funcionar en el país
Más de 60 aeronaves que operan en la Argentina bajo el modelo de leasing están en riesgo de quedar en tierra e incluso de ser devueltas a su arrendador.
En plenas vacaciones de invierno, corren riesgo miles de vuelos previstos para la temporada: más de 60 aviones podrían dejar de funcionar en la Argentina. Así lo alertó la Asociación Latinoamericana y del Caribe de Transporte Aéreo (ALTA), que nuclea a 157 aerolíneas, entre ellas 49 que representan el 80% del tráfico aéreo en la región. La entidad le aseguró a El Cronista que "prácticamente todas las aéreas que operan en el país están complicadas".
La advertencia gira en torno a la dificultad para pagar el alquiler de las aeronaves a los lessors extranjeros por la escasez de dólares. "ALTA expresa su preocupación por la falta de definición sobre los procesos y tiempos para la emisión de giros al exterior en el marco del Sistema de Importaciones de la República Argentina y Pago de Servicios al Exterior (Sirase). Más de 60 aeronaves que operan en el país bajo el modelo de leasing están en riesgo de quedar en tierra e incluso de ser devueltas a su arrendador", informó en un comunicado.
La asociación recordó que semanas atrás dos aeronaves ya estuvieron en tierra, en referencia al episodio de Flybondi. A comienzos de junio, la low-cost argumentó que se vio limitada para girar dinero al exterior para el pago del leasing, por lo que debió suspender 22 vuelos y reprogramar 10, lo que afectó a 5500 pasajeros.
"Los operadores requieren el acceso a dólares para un número importante de sus costos. Deben afrontar el pago de servicios y bienes en el exterior por no contar con proveedores locales, como arrendamiento de aeronaves, entrenamiento en simuladores, repuestos de mantenimiento y tasas de operación en el espacio aéreo de otras naciones y de aeropuertos del exterior, por nombrar algunos", describió ALTA.
Por eso, agregó, "la importancia de tener procesos claros con tiempos estándares y una respuesta oportuna que garantice el cumplimiento de los compromisos y, por lo tanto, el funcionamiento de este sector esencial para la población: la Argentina está conectada con más de 70 rutas internacionales y tiene más de 110 domésticas, posibilitando el intercambio comercial y el desarrollo socioeconómico".
Y amplió: "La falta de respuesta para la emisión de giros está repercutiendo en el cumplimiento de las condiciones asumidas en los contratos de arrendamiento y puede resultar en la pérdida de aeronaves, lo que es particularmente complejo en un mercado que ya muestra escasez de aviones disponibles. Además, repercute en el nivel de confianza en el país, dado que los proveedores internacionales comienzan a cuestionar la capacidad de mantener los acuerdos".
Por todo esto, ALTA reiteró "la urgencia de contar con procesos claros y agilidad en la emisión de giros al exterior, puesto que, bajo las actuales condiciones, sería muy difícil para los operadores reponer aviones que pierdan debido al retraso en los pagos". "En los últimos años, el mercado ha experimentado dificultades para el arrendamiento de aviones", destacó.
Y resaltó que la Argentina es Estado signatario del Convenio de Ciudad del Cabo, tratado que establece un marco legal y tiene como objetivo proporcionar seguridad jurídica y facilitar las transacciones de alquiler de aviones. "Estipula que, en caso de incumplimiento, el arrendador puede tomar posesión, con lo cual el cese de operaciones será inmediato, generando afectaciones a los usuarios y todas las partes interesadas", concluyó.