

Christies vendió u$s 3000 millones y Sothebys u$s 2540 millones en el primer semestre del año, por encima de los que había comercializado en en la primera mitad de 2016.
Específicamente en cuanto a las ventas privadas, han sido menores que las previstas y en Christies vendieron solamente u$s 155 millones, que es un escaso 5% de su facturación. Este porcentaje crecerá en lo que queda del año.
Su mayor venta fue la pequeña cabeza en bronce de Constantin Brâncu que llegó a los u$s 57,4 millones. En Norteamérica vendieron u$s 1500 millones, pero en China vendieron un 15% menos que el año pasado, las mayores ventas de arte asiático fueron en Nueva York en marzo, donde vendieron u$s 423 millones.
Los compradores chinos estuvieron activos en Londres y en Manhattan y se llevaron el 20% de los principales lotes vendidos (38 de ellos superaron los u$s 12 millones). La venta en línea (por internet) no creció y representa solamente u$s 25 millones de dólares, menos del 1% de sus ventas.
Buena noticia es que el 25% de los compradores son nuevos y gastan mucho más que el año pasado, curiosamente no compran arte contemporáneo, sino joyas, vinos, relojes y carteras.
Las ventas en la Feria Basel, en Suiza, fueron muy buenas y algunos las estiman en u$s 1.000 millones, en cambio las de ARCO y ARTEBA, en nuestra la Ciudad de Buenos Aires, no fueron buenas, no sólo por la pobreza de lo ofrecido, sino también por la "locura" de los precios solicitados.
Un dato positivo fue la venta de la monumental escultura del colombiano Fernando Botero, que quedará en el país y se podrá disfrutar en el Pilar Golf Club, que también inaugurará un hotel Hilton en los próximos meses, se podrá ver un parque de esculturas ya que también hay una gran cantidad de obras del brillante Bastón Díaz.
Por suerte, una de las mayores colecciones de esculturas de artistas argentinos está siendo generosamente colocada en lugares públicos de Pinamar. También su histórico hotel Playas ya es un hotel de arte con 12 esculturas de Fontana, Minujín, Pagés y otros grandes.
Por otro lado sorprendieron los precios de las ventas de esculturas en todo el mundo con récords para Henry Moore, Brâncu, Max Ernst, Barbara Hepworth y de Pablo Curatella Manes y Botero. Antes representaban solamente el 5% de las ventas y ahora son más del doble en el balance semestral.
Phillips y Bonhams también han crecido en sus ventas en subasta y lo mismo sucedió con las grandes rematadoras chinas que incluso vendieron una gran tinta de un artista local en más de u$s 50 millones. Esperemos que la tendencia siga en el segundo semestre.













