Menos de dos meses después de haberse quedado con Paramount, su nuevo CEO David Ellison se juega todo para adquirir a otro gigante de Hollywood que lo dobla en tamaño.

Luego de que Netflix anunciara la compra de Warner Bros. Discovery (WBD) por u$s 82.700 millones el pasado 5 de diciembre, Ellison lanzó una de las ofertas hostiles más audaces de la historia para arrebatarle a Netflix la adquisición.

Lo hizo presentándose directamente a los accionistas de WBD y ofreciendo u$s 108.000 millones por la compañía, en lo que se espera que sea una dura batalla. Esto implica que el acuerdo podría concretarse directamente mediante una votación de los accionistas, salteando al directorio de WBD.

La combinación de Warner Bros. Discovery y Paramount colocaría a Ellison al frente de dos de los estudios más emblemáticos de Hollywood y de decenas de redes de cable, como HBO y CNN, además de toda la biblioteca histórica de series y películas de WBD, lo que le otorgaría la escala para competir en el streaming.

De esta manera, una sola compañía controlaría casi la totalidad de los canales estadounidenses y pasaría a tener una mayor cuota de mercado que el actual líder, Disney. Paramount es, a su vez, propietaria de canales como MTV, Comedy Central, Nickelodeon, Paramount+ - su principal plataforma de streaming-, Pluto TV, además del estudio homónimo.

Una fusión entre Paramount Skydance y Warner Bros. sería un grave problema antimonopolio, y precisamente lo que nuestras leyes antimonopolio están diseñadas para prevenir”, declaró la senadora demócrata Elizabeth Warren, luego de que se hiciera pública la oferta. La propuesta hostil “está respaldada por un grupo de allegados a Trump, lo que plantea serias dudas sobre tráfico de influencias, favoritismo político y riesgos para la seguridad nacional”, dijo.

Larry y David Ellison
Larry y David Ellison

Y es que la oferta de Paramount tiene de inversor a Affinity Partners, el fondo financiero de Jared Kushner, marido de Ivanka Trump y exasesor del presidente estadounidense, un vínculo que abre la pregunta sobre el papel que jugará Donald Trump en la disputa de los dos gigantes.

No sería la primera vez que el presidente estadounidense entra en juego. Antes de que Ellison se convirtiera en el accionista dominante y director ejecutivo de Paramount tras la fusión entre Skydance Media y Paramount Global en agosto de este año, el gobierno de Trump demoró por meses la transacción.

Es que Trump demandó a Paramount por “60 Minutes” y su entrevista con la exvicepresidenta Kamala Harris durante las elecciones de 2024 en la que alegó que CBS editó engañosamente la entrevista para impulsar a Harris. Finalmente, el canal pagó u$s 16 millones para resolver la demanda judicial.

Trump declaró que llegó a un “acuerdo paralelo” con Ellison por u$s 20 millones en publicidad y avisos públicos para promover causas que le gustan. Ahora, la nueva relación de Ellison con la administración Trump podría jugar a favor de Paramount.

Sin embargo, y a pesar de que David Ellison es hijo de Larry, el segundo hombre más rico del mundo según Bloomberg, el ejecutivo no tiene los fondos para sostener una empresa del tamaño de WBD.

Así lo dejó en claro el directorio de WBD, días antes de anunciar su acuerdo con Netflix. David Zaslav, director ejecutivo de Warner Bros, llamó a Ellison para manifestarle su preocupación por la estructura financiera de Paramount y sus variadas fuentes de financiación, tras el creciente interés del gigante de Hollywood en adquirir WBD.

Ahora, el Consejo de Administración de WBD deberá revisar y considerar cuidadosamente la oferta de Paramount en los próximos días antes de llegar a una conclusión, aunque no modificó su recomendación con respecto a Netflix.