La fruta que le da juventud a tu piel: tiene propiedades antioxidantes, repara los daños, hidrata y controla la grasa

La salud de la piel es esencial para el bienestar general. Hidratarla adecuadamente es clave, ya que la piel tiende a volverse más fina y menos elástica con la edad. Una alimentación sana, rica en verduras y frutas, proporciona nutrientes esenciales para mantener la elasticidad y prevenir la sequedad.

Estos alimentos contienen antioxidantes que combaten los radicales libres, protegiendo la piel del daño causado por factores externos. Además, mantenerse bien hidratado internamente contribuye a una piel radiante.

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Los expertos en la salud de la piel recomiendan siempre combinar cuidados externos con una dieta equilibrada es fundamental para preservar la salud y la juventud de la piel.

La fruta que ayuda a tener la piel joven y bella

Según una publicación de la revista Semana, la fruta que ayuda a reparar la piel por los daños del Sol y de paso es excelente para controlar la acumulación de la grasa, es el maracuyá.

El maracuyá emerge como un aliado vital para la salud cutánea. Con abundantes vitaminas como la A y C, actúa como potente antioxidante, previniendo el envejecimiento y restaurando daños solares.

Su contenido de potasio, fósforo y magnesio protege la piel facial, mientras que su riqueza en hierro favorece la formación de hemoglobina.

El artículo destaca propiedades hidratantes y antiinflamatorias de esta fruta tropical. El maracuyá también controla el exceso de grasa en el cuerpo. Publicaciones avaladas por la Universidad Nacional de Colombia subrayan sus beneficios, demostrando una significativa reducción en células cancerígenas, respaldando su papel en la prevención y el cuidado de la piel.

Dos formas de aprovechar los beneficios del maracuyá en tu piel

Incorpora esta fruta ácida en tu dieta o rutina de maquillaje.

Para un mejor provecho, puedes usar la pulpa del maracuyá y consumirla de forma directa o bien, agregarlo a un delicioso jugo en agua mineral.

También puedes usar la pulpa del maracuyá como mascarilla. De manera sencilla, agrega a un maracuyá dos cucharadas de miel, revuelve con movimientos envolventes y una vez esté hecha la pasta, aplica durante unos 15 minutos en tu piel y remueve con abundante agua fría.