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En medio del estrés que ocasiona la rutina diaria del trabajo para muchas personas, puede volverse habitual la pérdida de objetos importantes, tales como el documento, las llaves o la billetera.
En estos contextos suele reinar la desesperación, un factor que en la mayoría de los casos juega en contra en la intensa búsqueda por hallarlos.
Para estas circunstancias, algunos individuos recurren a la espiritualidad y la fe, siendo su motor de búsqueda y apoyo en momentos difíciles.
¿A quién debe recurrirse para recuperar objetos perdidos?
Quienes profesen la religión católica, deben saber que existe un santo que podría contribuir a hallar todos aquellos objetos que no se encuentren desde hace ya un tiempo.
Se trata de San Antonio Abad, el "Santo de las causas perdidas" que no sólo ayuda a iluminar el camino y la búsqueda de los desamparados, sino que también vela por los solteros y la protección de los hijos.
Si bien no cuenta con comprobación científica, esta oración ha estado muy presente en diversas culturas y ha formado parte de distintas creencias, por lo que su poder se resume a la fe de cada individuo.
Oración de San Antonio para recuperar objetos perdidos
"San Antonio, patrón de lo perdido, se le ruega que ayude a encontrar lo que se ha extraviado. En momentos de angustia y desesperación, se pide que ilumine el camino y guíe hacia la recuperación de lo perdido. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, así sea."
La letanía de San Antonio
Otra de las opciones que se recomienda seguir es la de recitar la letanía de San Antonio, que también sirve para intentar hallar objetos de los cuales se desconoce su procedencia.
Nueva salud (San Antonio, ruega por nosotros),
nuestra paz y sosiego,
nuestra casa,
nuestra seguridad financiero,
a un ser querido,
la esperanza,
nuestros sueños,
nuestro talento,
nuestro celo inicial,
nuestra templanza,
nuestra fe,
nuestra dignidad,
nuestra perspectiva,
nuestra inocencia,
nuestra libertad,
la paz en nuestra familia,
la paz es nuestra sociedad,
nuestra confianza en otros,
nuestra virtud,
nuestro hogar,
(mencionar aquí su pérdida personal)
San Antonio, ruega por nosotros.
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo,
Ten piedad de nosotros.
¿Cuál es la oración final?
Dios, todo Amor y Bondad, que nos has dado a San Antonio como santo patrono de las cosas perdidas, suplicamos por medio de este glorioso intercesor tu misericordia. Escucha su voz cuando clame a ti a favor nuestro y, concédenos aquello que nos ayude a crecer en tu amor.
Amén.
