

Los republicanos en el Congreso de Estados Unidos y la Casa Blanca propusieron hoy reducir los impuestos a las ganancias corporativas y a los más ricos, como parte de un nuevo plan de reforma tributaria.
La propuesta de reforma fiscal del presidente estadounidense Donald Trump incluye una rebaja de la tasa impositiva de las empresas del 35% al 20%, la supresión del impuesto de sucesiones y la reducción de 7 a 3 de las categorías de pago de impuestos a la renta de las personas físicas (12%, 25% y 35%).
El plan con el que se busca lograr la mayor reforma fiscal en EE.UU. desde 1980 fue titulado "Marco unificado para arreglar nuestro fallido código fiscal" y fue divulgado hoy conjuntamente por la Casa Blanca y los republicanos.
"El objetivo es volver a hacer competitivo EE.UU. a nivel global, y ofrecer alivio fiscal a la clase media y a los empresarios", explicó un funcionario gubernamental a EFE en una conferencia telefónica para comentar detalles del plan.
La propuesta prevé simplificar las categorías de pago de impuestos de la renta de 7 a 3 de las personas físicas: 12%, 25% y 35%. Las nuevas cifras suponen reducir el tipo máximo, actualmente del 39%, y elevar levemente el mínimo, del 10%.
Como se había anunciado previamente, Trump propone elevar las deducciones fiscales para las familias con hijos y crear una nueva para adultos dependientes, como personas mayores o enfermos.
También elimina el impuesto de sucesiones, algo ya adelantado por la Casa Blanca, y se amplía la deducción básica para personas a u$s 12.000 y u$s 24.000 para parejas.
Críticas
Una de las principales críticas planteadas al proyecto es cómo se compensará este descenso de ingresos fiscales para equilibrar las cuentas públicas y que no genere aumento en el déficit presupuestario.
Los republicanos argumentan que los recortes, filtrados a los medios en los últimos días, estarían compensados por nuevos ingresos al eliminar vacíos legales, aunque se espera que se identifiquen pocos o ninguno de ellos en el plan.
Asimismo, vaticinan que las rebajas fiscales de Trump, si logran la aprobación del Congreso, llevarían a un crecimiento económico más fuerte.
Trump y sus aliados hicieron de la reforma fiscal una de sus principales promesas de campaña en las elecciones de 2016 y ahora afrontan una creciente presión para completarla desde que fracasó el último intento Republicano de derribar la ley de salud llamada ‘Obamacare’.













