Desde Silicon Valley hasta Wall Street, la inteligencia artificial (IA) traspasó las barreras del ecosistema tecnológico y se consolidó como una apuesta obvia en el sistema financiero, dadas las grandes expectativas vinculadas al crecimiento potencial de esta herramienta. De hecho, el portal de estadísticas Statista reveló que la valorización de este mercado superaría los u$s 300.000 millones en 2025.

Empresas como Nvidia, Microsoft y Google son algunas de las caras representativas de la IA en las bolsas financieras. Si bien son compañías extranjeras, existe una manera de aprovechar el negocio de estos gigantes tecnológicos desde la Argentina y en simples pasos. 

En efecto, los inversores pueden acceder a lo que se conoce como un Exchange-Traded Fund (ETF). Como su nombre lo indica, son fondos de inversión cuya principal característica es que sus acciones cotizan en la bolsa igual que lo hace una empresa como Meta. Suelen tener bajos costos  y representan una gran alternativa para diversificar el portafolio. A continuación, algunas propuestas populares. 

Si bien existe una gran variedad de ETFs en el mercado, algunos que ganaron especial terreno este año son aquellos relacionados a la IA. En Argentina, se puede acceder a ellos mediante los CEDEARs.

Cómo invertir en inteligencia artificial desde la Argentina

En lo que va del año, tres ETFs vinculados a la IA se destacaron en particular: BOTZ, THNQ y AIQ. El primero, busca proporcionar resultados de inversión que correspondan generalmente al precio y al rendimiento del índice temático Index Global Robotics & Artificial Intelligence.

En otras palabras, apuesta por empresas que potencialmente sacarán provecho de una mayor adopción y utilización de la robótica y la inteligencia artificial (IA), incluidas aquellas asociadas con la robótica y la automatización industriales, los robots no industriales y vehículos autónomos.

El ETF THNQ, por su parte, está pensado para seguir el índice ROBO Global Artificial Intelligence; incluye firmas que desarrollan tecnología e infraestructura que permiten la IA, como informática, datos y servicios en la nube, así como empresas que aplican la IA en diversos verticales. 

Por último, AIQ proporciona resultados a partir del índice Artificial Intelligence & Big Data Index. Similar a los ejemplos previos, este instrumento se enfoca en compañías que puedan beneficiarse de un mayor desarrollo y utilización de la IA en sus productos y servicios, así como en empresas que proporcionan hardware para facilitar el uso de esta tecnología en el análisis de big data.