

Las órdenes de Griesa se están convirtiendo en un "big bang" para los bonos argentinos y la preocupación de los inversores sobre el alcance de las medidas a los títulos fuera del canje (Boden y Bonar) están bien fundadas, según Barclays. Sin embargo, el banco aclara que ésta no debería ser una preocupación a corto plazo, debido al que el proceso de apelación puede tardar mucho tiempo.
"Las órdenes del pari passu de febrero de 2012 tomaron hasta junio de 2014 para entrar en vigor, debido a un largo proceso de apelaciones. Esto significa que el Boden 15, el cual vence en unos seis meses, estaría en condiciones de ser pagado", argumentó el banco de inversión en un informe.
Por otro lado, los pagos de los Bonar quedarían sujetos a un largo proceso de apelación, que podría no llegar a tener efecto, ya que el banco espera una negociación antes de que esto suceda.
En relación al acuerdo que Euroclear selló con los holdouts con el compromiso de informar cualquier pago o bono relacionado con el litigio, desde Barclays sostienen que un aspecto importante de esta orden es que refiere exclusivamente a los bonos del canje y por lo tanto, excluye a los pagos de otros bonos locales, incluyendo los Bonar y Boden.
Es por esto que cualquier movimiento negativo de los precios en estos títulos, que se le pueda atribuir a estas dos cuestiones jurídicas, debe ser visto como una oportunidad de compra, de acuerdo a Sebastián Vargas, analista de Barclays.













