
El oro dejó de ser atractivo en 2013. Cuando el mundo inversor puso fin a su historia de amor con el metal (lo que en abril y junio provocó la caída del precio más pronunciada de la era moderna), pocos tuvieron tiempo para concentrarse en su hermana, la plata.
Pero la plata fielmente siguió la tendencia bajista del metal dorado. Si bien el oro retrocedió 34,5% de su pico de octubre y alcanzó su nivel más bajo a fines de junio, el derrumbe de la plata fue aún más precipitoso ya que fue del orden de 48,5%.
Y ahora que los metales preciosos están recuperándose, la plata está captando mayor interés. Desde su piso de fines de junio, se recuperó 32%.
Está entrando el dinero inteligente, señaló un ejecutivo de una sociedad bursátil. Creo que los precios bajos están realmente empezando a tener un efecto sobre la demanda.
Si bien el movimiento del precio de la plata reflejó mayormente el del oro, en muchos casos su dinámica de mercado es opuesta a la del metal dorado.
Uno de los elementos más visibles de la liquidación de oro, por ejemplo, fue la pronunciada disminución en las posiciones que mantienen los fondos de inversión que cotizan en bolsa. Desde principio de año, esos fondos (que supuestamente son una forma de invertir a largo plazo) vendieron 680 toneladas de oro, es decir 25% de sus tenencias.
Por el contrario, los fondos de plata tuvieron compradores netos, y sus posiciones se elevaron 6% este año y alcanzaron un nuevo pico récord en agosto.
Otros indicadores de la demanda inversora occidental muestran que los inversores minoristas son los más ardientes entusiastas de la plata. Las ventas de monedas de este mental en la Casa de la Moneda norteamericana se están acelerando a un ritmo récord este año. Hasta fines de agosto hubo compradores para 33 millones de onzas (1.026 toneladas), cifra similar al total de 2012.
Asimismo, las importaciones de plata en India subieron abruptamente. Según Sudheesh Nambiath, analista de Thomson Reuters GFMS en Mumbai, sus importaciones totales se duplicaron comparado con el año pasado a casi 3.000 toneladas en el primer semestre de 2013, frente a las 1.900 toneladas de todo 2012.
Como consecuencia de las restricciones para el oro, los operadores se volcaron a la plata, explicó Nambiath que luego agregó que la demanda de joyas de plata probablemente aumente 20% interanual y que los fabricantes ya tienen completos los libros de pedidos hasta diciembre.
Finalmente, si bien la liquidación de oro se debió mayormente a la probabilidad de que la Reserva Federal norteamericana comience a disminuir su programa de estímulo monetario en medio de una recuperación económica, eso podría terminar siendo positivo para la plata.
A diferencia del oro, cerca de la mitad de la demanda de plata es industrial, siendo el metal muy utilizado en aplicaciones electrónicas. Si la economía global se fortalece, la plata debería tener un mejor desempeño.











