
La demanda de monedas de plata de Estados Unidos se incrementó a un nivel récord este año debido a que los pequeños inversores salieron a desafiar el pesimismo en torno a los metales preciosos.
Las ventas American Eagles de plata, una de las monedas de inversión más populares del mundo, hasta ahora superaron los 40 millones de onzas, nivel mayor al récord anual anterior de 39,9 millones registrado en 2011.
Si bien las ventas de monedas representan una parte relativamente chica de los mercados de plata y oro, los analistas las consideran un barómetro del ánimo de los inversores chicos.
La fuerte demanda se produce en un momento en que registran bajas los precios de la plata; el volátil metal cayó 32% desde que empezó el año. El mercado de la plata mayormente siguió los movimientos del oro, que retrocedió 24% en la que va de 2013.
Sin embargo, si bien los inversores en oro se deshicieron de sus tenencias, los inversores de plata se mostraron más firmes. El mercado de la plata está menos dominado por los grandes administradores de activos y hedge funds comparado con la plaza del oro, lo que significa que los inversores minoristas tienen mayor influencia.
Los inversores de plata tienden a ser mayormente minoristas, comentó James Steel, analista de metales preciosos en HSBC en Nueva York. A medida que los inversores institucionales reduzcan su exposición, las actividades de los inversores chicos resonarán con más fuerza, agregó.











