
La semana pasada comenzó un programa de financiamiento para materias primas sustentables respaldado por bonos verdes y que apunta a apoyar a los agricultores brasileños que evitan la deforestación en el país.
La Facilidad para Materias Primas Responsables brindará líneas de crédito baratas a productores de soja y maíz brasileños que se comprometan a no deforestar.
Respaldado por el gobierno británico y la ONU, el programa será administrado por Sustainable Investment Management (SIM), una firma financiera ambiental boutique creada por expertos en banca, comercialización de materias primas y financiamiento ambiental.
SIM colocará bonos verdes por u$s 1000 millones en los próximos cuatro años, que se espera resulten en 180 millones de toneladas de soja y maíz responsables, valuadas en u$s 43.000 millones en la primera década. La primera emisión de u$s 300 millones está planificada para la temporada de siembra de 2020.
La mayor demanda de soja podría provocar la reconversión de más de 6 millones de hectáreas de la sabana brasileña El Cerrado en los próximos diez años. Los agricultores, las comercializadoras de materias primas y las compañías alimenticias buscan la manera de evitar la degradación de la sabana sin privar a los productores de potenciales ingresos.
El país prometió reducir 43% las emanaciones para 2030, y se espera que casi 90% de esa reducción provenga de la menor deforestación aunque los mecanismos de financiación existentes probablemente no ayuden a cumplir con esa meta, según SIM.













