Dónde comer en Valladolid: el bar que es furor por sus croquetas cremosas de jamón y sus buñuelos de bacalao
Con muchos años de historia, este local ha sabido mantener su esencia y ofrecer calidad a sus clientes, convirtiéndose en un referente gastronómico de la ciudad.
En el corazón de Valladolid, a pocos pasos de la Plaza Mayor, se encuentra El Corcho, un bar que ha ganado fama gracias a sus exquisitas croquetas cremosas de jamón.
Este plato, que forma parte de la tradición culinaria española, nació de una sencilla necesidad, aprovechar el excedente de jamón utilizado para los canapés. Con más de 35 años de historia, El Corcho es actualmente un referente para quienes buscan disfrutar de la auténtica cocina vallisoletana.
Dónde comer en Valladolid: encuentra las mejores croquetas de la zona en El Corcho
En El Corcho, la clave del éxito de sus croquetas de jamón ibérico radica en la tradición y el cariño con el que se elaboran.
A lo largo de más de tres décadas, Chema y Sara, los creadores de este lugar, han mantenido la filosofía de ofrecer siempre la mejor calidad al mejor precio, respaldados por un equipo de profesionales que conocen a la perfección el arte de la cocina.
Las croquetas se preparan con una base de bechamel de alta calidad, que se deja reposar durante una hora para luego bolearlas a mano, empanarlas y freírlas en el momento.
Este proceso cuidadoso asegura que cada croqueta sea cremosa por dentro y crujiente por fuera, una combinación que las convierte en la especialidad más demandada por los clientes.
Durante los días laborables, El Corcho llega a vender más de 400 croquetas; mientras que los fines de semana, la cifra supera el millar. Esta popularidad no es casualidad, quienes las prueban se rinden ante su sabor y su textura perfecta.
Escapada gastronómica: ¿cómo llegar al restaurante El Corcho desde Madrid?
Si te encuentras en Madrid y deseas disfrutar de las delicias que ofrece El Corcho en Valladolid, la opción más rápida para llegar en automóvil es tomar las carreteras AP-6 y A-6.
Este recorrido demanda un tiempo aproximado de 2 horas y 20 minutos, sin contar los peajes y demoras por el tráfico.