Puigdemont quema puentes con el PSOE y el PP exige que se adelante las elecciones

La política española enfrenta una nueva crisis tras la decisión de Carles Puigdemont, presidente de Junts per Catalunya, de suspender todas las negociaciones sectoriales con el Partido Socialista Obrero Español (PSOE). Esta medida incluye la paralización de conversaciones sobre los Presupuestos Generales del Estado y otras iniciativas legislativas clave. 

Puigdemont ha exigido una reunión urgente en Suiza con mediador internacional para evaluar el cumplimiento de los acuerdos establecidos durante la investidura de Pedro Sánchez en noviembre de 2023.

La suspensión de las negociaciones se produce después de que la Mesa del Congreso pospusiera nuevamente la decisión sobre la proposición no de ley presentada por Junts, que insta a Sánchez a someterse a una cuestión de confianza.

Puigdemont ha manifestado que esta falta de decisión demuestra que el PSOE ha comprendido la seriedad de Junts y el riesgo real de una ruptura. Además, ha advertido que, si no se recupera la confianza y se respeta el acuerdo en su totalidad, la situación empeorará.

Reacción del Gobierno y del PP

Ante esta situación, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Jesús Montero, ha asegurado que continuarán trabajando "hasta la extenuación" para restablecer los puentes con Junts, enfatizando la capacidad de diálogo del Ejecutivo.

Por su parte, el ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, ha reiterado que el diálogo es una seña de identidad indiscutible del Gobierno y que seguirán sentándose con quienes piensan diferente para alcanzar acuerdos.

En contraste, el Partido Popular (PP) ha intensificado su presión sobre el Gobierno. La secretaria general del PP, Cuca Gamarra, ha declarado que el Ejecutivo "está muerto" debido a su incapacidad para gobernar y la falta de una mayoría parlamentaria que lo respalde.

Gamarra ha instado a Sánchez a convocar elecciones anticipadas, argumentando que, sin la posibilidad de aprobar presupuestos, leyes y decretos, la única opción es consultar a los ciudadanos a través de las urnas.

Posición de Junts y posibles escenarios

A pesar de la suspensión de las negociaciones, Puigdemont ha aclarado que Junts no se ha instalado en la "trinchera del no" y que ciertas negociaciones, como las relacionadas con la delegación de competencias en materia de inmigración a Cataluña y la oficialidad del catalán en la Unión Europea, continuarán.

Sin embargo, ha enfatizado que no participarán en negociaciones sobre los presupuestos ni en la convalidación de decretos ley hasta que se restablezca la confianza. 

Puigdemont ha descartado apoyar una moción de censura junto al PP, pero ha señalado que, si se produce una ruptura definitiva con el PSOE, apelará a Sánchez para que convoque elecciones anticipadas, considerando que el Gobierno habría perdido su mayoría.

Esta postura coloca al Ejecutivo en una posición delicada, ya que la falta de apoyo de Junts podría dificultar la aprobación de legislaciones clave y generar inestabilidad política.

Impacto en la legislatura y perspectivas futuras

La actual crisis refleja las tensiones latentes en la política española y la fragilidad de las alianzas que sostienen al Gobierno. La insistencia de Puigdemont en que Sánchez se someta a una cuestión de confianza y la suspensión de las negociaciones sectoriales evidencian una erosión en la relación entre Junts y el PSOE.

Mientras tanto, el PP busca capitalizar esta situación para promover un adelanto electoral que podría redefinir el panorama político del país. En este contexto, la capacidad del Gobierno para gestionar las demandas de sus aliados y de la oposición será crucial para determinar la estabilidad de la legislatura y el futuro político de España.