Excelente noticia: esto es lo que cobran los jubilados que viven en el extranjero
Cómo afecta la residencia en el extranjero a las pensiones de jubilación de los ciudadanos españoles
La jubilación es una etapa esperada y, para muchos, el momento ideal para disfrutar de una vida más relajada, quizás en otro país. Tras años de trabajo y contribuciones, el retiro trae consigo ciertas inquietudes, especialmente cuando se trata de aquellos que deciden vivir esta fase fuera de su país de origen.
Las condiciones de cobro, los trámites y las obligaciones fiscales varían dependiendo de la residencia y el sistema de Seguridad Social de cada nación.
La globalización y la movilidad internacional han llevado a que muchos jubilados españoles decidan pasar su retiro en el extranjero. Esta elección plantea preguntas sobre cómo se gestionan y perciben las pensiones de jubilación fuera de España. ¿Se mantiene el mismo importe? ¿Existen requisitos adicionales?
Cobro de la pensión contributiva en el extranjero
Los pensionistas españoles que residen fuera del país pueden seguir recibiendo su pensión contributiva sin inconvenientes. La Seguridad Social permite que los jubilados vivan en el extranjero y continúen percibiendo su pensión, siempre que esta sea de carácter contributivo.
(Fuente: Shutterstock)
Complemento a mínimos
Este suplemento se otorga a quienes no alcanzan una pensión mínima establecida. Si el pensionista reside fuera de España, no tiene derecho a este complemento.
Certificado de vida
Para garantizar la continuidad en el cobro de la pensión, es obligatorio presentar periódicamente un certificado que acredite que el beneficiario sigue con vida. Este documento puede obtenerse en el Registro Civil Consular o en la Sección de Empleo y Seguridad Social del país de residencia.
Implicaciones fiscales y trámites necesarios
Residir en el extranjero puede tener implicaciones fiscales para los jubilados españoles. Es fundamental considerar:
- Residencia fiscal: Si se permanece más de 183 días al año fuera de España, se puede perder la residencia fiscal española, lo que implica estar sujeto a las leyes fiscales del país de residencia. Esto puede conllevar la obligación de presentar declaraciones de impuestos y pagar tributos sobre los ingresos y activos generados allí.
- Convenios de doble imposición: España tiene acuerdos con varios países para evitar la doble tributación. Es recomendable informarse sobre estos convenios para entender cómo se gravarán las pensiones en cada país y evitar pagar impuestos duplicados.
Pensiones no contributivas y excepciones
Las pensiones no contributivas, destinadas a quienes no han cotizado lo suficiente, requieren que el beneficiario resida en España. Por lo tanto, al trasladarse al extranjero, se pierde el derecho a percibir este tipo de pensión.
Además, es importante destacar que, aunque se resida en el extranjero, se debe cumplir con las obligaciones establecidas por la Seguridad Social española, como la presentación del certificado de vida y, en casos de pensiones por incapacidad permanente, someterse a revisiones médicas periódicas.
(Fuente: Shutterstock)
Los jubilados españoles que deciden vivir en el extranjero pueden seguir percibiendo su pensión contributiva, pero deben estar atentos a las implicaciones fiscales y a los trámites necesarios para garantizar la continuidad en el cobro de su prestación. Es aconsejable informarse adecuadamente y cumplir con las obligaciones establecidas para evitar inconvenientes.