NO LAS USES | Las freidoras de aire "disparan" una sustancia tóxica y cancerígena, según la OCU

Las freidoras de aire, un electrodoméstico cada vez más popular por su capacidad de cocinar con poco o nada de aceite, han captado la atención de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU). La entidad española ha lanzado una alerta en la que advierte sobre la posible formación de acrilamida, una sustancia tóxica y potencialmente cancerígena, al cocinar ciertos alimentos a temperaturas elevadas en este tipo de aparatos. La OCU recomienda tomar precauciones al cocinar patatas, pan y otros productos ricos en almidón para evitar riesgos de salud.

Este anuncio ha generado dudas entre los usuarios, quienes buscan alternativas saludables para cocinar en casa. Sin embargo, es importante conocer los detalles de esta advertencia y seguir ciertas recomendaciones para minimizar los riesgos.

¿Qué es la acrilamida y cómo se forma en las freidoras de aire?

La acrilamida es un compuesto que se genera cuando los alimentos ricos en almidón se exponen a temperaturas superiores a los 195°C, como ocurre al cocinar patatas, pan o ciertos productos horneados. Esta sustancia ha sido clasificada como potencialmente cancerígena por la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC), debido a estudios que asocian su exposición prolongada con el desarrollo de cáncer en animales de laboratorio.

La OCU enfatiza que las freidoras de aire, al funcionar como pequeños hornos de convección, alcanzan fácilmente temperaturas elevadas que pueden favorecer la formación de acrilamida. En su análisis, la organización recomienda limitar la temperatura en estos aparatos y controlar los tiempos de cocción, especialmente para alimentos como patatas fritas y otros productos de alta carga de almidón.

Consejos para reducir la exposición a la acrilamida

Para minimizar el riesgo, la OCU sugiere una serie de prácticas al cocinar con freidoras de aire. Primero, se recomienda mantener la temperatura por debajo de los 195°C cuando se preparen alimentos susceptibles a la formación de acrilamida. Además, evitar tiempos de cocción excesivos y utilizar las configuraciones de menor temperatura, cuando sea posible, puede ayudar a reducir este riesgo.

Otra recomendación es variar los tipos de alimentos cocinados en las freidoras de aire, optando por recetas de carnes, verduras o pescados, que no presentan el mismo riesgo de generar acrilamida. La OCU también indica que revisar las instrucciones y configuraciones de cada modelo es clave, ya que algunos aparatos cuentan con programas automáticos que ajustan la temperatura y tiempo según el tipo de alimento.

Opciones de freidoras de aire más seguras y cómo elegir un buen modelo

En su análisis de más de 75 modelos de freidoras de aire, la OCU encontró diferencias importantes en cuanto a la seguridad, facilidad de uso y rendimiento. Modelos como el Cecotec Full Inoxblack 5500 y el Ufesa Talent destacan por sus programas automáticos y funciones de control de temperatura, lo que permite un uso más seguro. 

Además, algunas freidoras ofrecen opciones avanzadas como doble cubeta, para cocinar distintos alimentos simultáneamente sin riesgo de mezclar olores o sabores, y ventanas translúcidas que permiten ver el proceso sin abrir la tapa y perder calor.

Para quienes buscan una opción segura y económica, la OCU recomienda no gastar más de 100 euros, ya que existen modelos accesibles que ofrecen buena relación calidad-precio. Elegir una freidora con buen control de temperatura y programas automáticos puede hacer la diferencia en términos de seguridad y calidad de los resultados.