Hallazgo terrorífico: encuentran el fósil de una araña 5 veces más grande que las actuales que vivió hace 16 millones de años
El lugar donde se encontró esta araña es una llanura de pastizales, pero según los investigadores fue una selva tropical siglos atrás.
La arqueología volvió a despertar el interés de científicos tras el descubrimiento de un fósil, esta vez de una araña 5 veces más grande que las actuales que vivió hace unos 16 millones de años según los primeros estudios realizados.
Este sorprendente descubrimiento se dio en una zona muy particular, ya que actualmente se presenta como una llanura cubierta de pastizales, pero que hace varios siglos atrás habría sido una selva tropical en la que coexistían especies de todo tipo.
Descubrimiento arqueológico: ¿cómo es este fósil de una araña 5 veces más grande que las actuales?
Un equipo de investigadores de Australia dieron a conocer el hallazgo realizado en el área de McGraths Flat, perteneciente al estado de Nueva Gales del sur. Dicho espacio habría sido el hogar de este y otros animales extraños de dimensiones sorprendentes, aunque hoy es solo una llanura.
El nombre con el que se bautizó a esta rara especie es Megamonodontium mccluskyi en honor a su descubridor Simon McClusky. En tanto, su paso por la Tierra se habría dado entre 11 y 16 millones de años atrás, durante el período conocido como el Mioceno.
Esto no solamente representa todo un desafío para la ciencia en pos de descubrir los secretos de la especie, sino que también tiene una gran relevancia histórica por tratarse del quinto fósil de araña encontrado en el país de Oceanía.
Respecto a sus dimensiones, los académicos informaron que Megamonodontium mccluskyi tiene unos 50 milímetros de largo, es decir, algo así como 5 centímetros. Además, es el primer resto fosilizado de la familia Barychelidae hallado en el mundo hasta ahora.
¿Cuál es el pariente más cercano de la araña Megamonodontium mccluskyi?
Megamonodontium mccluskyi es una especie trampera, y su pariente más cercano actualmente es una araña que vive en los bosques húmedos de Singapur y Papúa Nueva Guinea. Esto hace suponer que la especie antigua desapareció a medida que el lugar fue convirtiéndose en una zona árida.
Hay que tener en cuenta un dato muy relevante: los fósiles de arañas son difíciles de encontrar debido a que los restos de estos animales se suelen descomponer fácilmente, de ahí lo valioso de este descubrimiento.