Cocina

El truco más sencillo para hacer una tortilla de patatas deliciosa, con poco aceite y sin grasas

Este truco con las patatas ha transformado por completo la forma de preparar la tortilla de patatas, uno de los platos más famosos.

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La tortilla de patatas es uno de esos platos que siempre salva cuando se acaban las ideas sobre qué cocinar. Es fácil, económica y deliciosa, pero, ¿quién no ha pensado alguna vez en hacerla más saludable?

A lo largo de los años, muchos han intentado encontrar maneras de disfrutar de esta receta sin recurrir al exceso de aceite, que tradicionalmente es uno de los ingredientes más utilizados para freír las patatas.

En este artículo te contaremos un truco sencillo y saludable para hacer una tortilla de patatas con mucho menos aceite, pero sin perder ese sabor y textura jugosa que tanto seduce.

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El truco para hacer una tortilla de patatas: asarlas en lugar de freírlas

Uno de los mayores retos a la hora de hacer una tortilla de patatas es reducir el uso de aceite sin comprometer el sabor. Asar las patatas enteras con su piel en la freidora de aire es el secreto que revoluciona la receta.

La freidora de aire, una aliada para recetas más saludables. (Foto: iStock)

Este sencillo cambio hace que la cantidad de aceite utilizada sea mínima, lo que permite disfrutar de una tortilla mucho más ligera y con menos calorías. Las patatas asadas absorben mejor el huevo que las patatas cocidas o fritas, lo que da como resultado una tortilla jugosa sin la necesidad de añadir un exceso de grasas. Además, este método es más rápido y cómodo que freír en abundante aceite, y el sabor es mucho más rico.

 Las patatas asadas absorben mejor el huevo que las patatas cocidas o fritas. (Foto: Unsplash)

Tortilla de patatas con menos aceite: los beneficios para la salud

Uno de los aspectos más interesantes de este truco es que, al asar las patatas, no solo se consigue una tortilla más ligera, sino que también mejora su perfil nutricional. Al reducir la cantidad de grasas en la receta, se obtiene una tortilla con una mejor combinación de carbohidratos complejos, proteínas de alto valor biológico de los huevos y solo una pequeña cantidad de grasas saludables del aceite de oliva.

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Además, si se añade cebolla no solo se enriquece el sabor, sino que también se suman antioxidantes y compuestos beneficiosos para la salud cardiovascular. 

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