Descubrimiento histórico | Hallan el árbol más antiguo de Europa: tiene más de 1600 años y esconde un secreto del Imperio Romano
Se trata de un ejemplar que resistió condiciones extremas y dificultades meteorológicas para sobrevivir desde el Imperio Romano hasta la actualidad
A partir de una nueva investigación científica se dio a conocer cuál es el árbol más antiguo de Europa. A diferencia de lo que muchos podrían pensar, no se trata de un roble de gran altura ni un imponente pino, sino todo lo contrario.
Según este nuevo hallazgo, el árbol más antiguo de Europa es un pequeño enebro común que crece en la Laponia finlandesa. El tronco mide menos de 10 cm de diámetro y se calcula que tiene 1647 años.
Debido a estos cálculos, se estima que el enebro brotó en el 378 d.C. Esto significa que no sólo es el más antiguo hallado en Europa hasta la fecha, sino que su existencia data desde tiempos del Imperio Romano.
El enebro común es utilizado principalmente para la cocina y la producción de ginebra, además de ser una de las especies de madera más extendidas en el mundo.
Este arbusto puede crecer en una amplia variedad de entornos, desde el nivel del mar hasta las regiones más extremas, como dunas o glaciares. Esto demuestra su capacidad de adaptación frente a condiciones climáticas opuestas.
El hallazgo del árbol más antiguo de Europa
El descubrimiento ha sido liderado por Marco Carrer, ecólogo forestal del departamento de Sistemas Agroforestales de la Universidad de Padua. La técnica utilizada fue el análisis de anillos leñosos que permite obtener información detallada sobre el crecimiento de la vegetación con el tiempo.
"Desde hoy, este récord se suma también al de ser el arbusto más antiguo del mundo", declaró el ecólogo para la revista Ecología.
Hasta ahora, el récord del árbol más antiguo de Europa lo tenía un ejemplar de pino italiano con 1230 años. Es decir, casi medio milenio más joven.
Por qué el árbol más antiguo de Europa logró sobrevivir tantos años
Al ser un arbusto de 10 centímetros de altura, los investigadores consideran una hazaña que haya resistido las condiciones extremas y las dificultades meteorológicas.
Debido a la región en la que fue encontrado y el tiempo transcurrido desde su brote, se estima que el enebro ha tenido que enfrentarse a gélidas temperaturas, escasez de nutrientes y diversos cambios climáticos.
Angela Luisa Prendin, coautora del estudio, habló de la importancia del estudio de los anillos de crecimiento en el proceso de investigación: "Estudiamos los anillos de madera para extraer información valiosa sobre el cambio climático y el desarrollo de la vegetación".
Estos anillos actúan como una especie de diario natural, registrando las condiciones ambientales y el cambio climático que ha experimentado el arbusto a lo largo de su vida.
Determinar la edad no es una tarea fácil para los investigadores. Cada anillo debe ser hecho con extrema precisión y luego las mediciones son comparadas con otras muestras de la misma área para obtener un resultado preciso y confiable.
La importancia del descubrimiento del árbol más antiguo de Europa
Este hallazgo es una oportunidad para comprender mejor los ecosistemas extremos y los desafíos que enfrentan las plantas en un cambio de clima cada vez más rápido.
Aunque pueda parecer una simple curiosidad botánica, los investigadores consideran que el enebro común es una muestra de cómo algunas especies pueden adaptarse a las condiciones climáticas más adversas.
El cambio climático es un fenómeno que afecta a la sociedad de manera integral, por lo que conocer los efectos que ha tenido en la naturaleza a lo largo de la historia puede resultar vital para el futuro.
De esta manera, se da una oportunidad para comprender mejor los ecosistemas extremos y los desafíos que enfrenta la vegetación expuesta a cambios de clima rápidos. Monitorear especies como el enebro ofrece indicaciones para proteger la biodiversidad y conocer cómo lidiar con estas condiciones climáticas.