Silvia Ciccone declaró hoy como testigo y confirmó que el vicepresidente Amado Boudou estuvo en al menos uno de los encuentros que tuvieron lugar por la venta de la gráfica, según le contara su padre, el ex dueño de la empresa.

Ante el juez federal Ariel Lijo además la mujer aseguró que ese encuentro tuvo lugar en un restaurante de Puerto Madero.

En medio de la declaración la defensa de Boudou pidió al juez Lijo que suspenda la testimonial al considerar que la mujer se estaba autoincriminando, pero el planteo fue rechazado por el magistrado y la mujer siguió declarando.

A principios de semana fue Graciela Ciccone, hija de uno de los fundadores de la empresa, quien presentó ante la Justicia un acta que da cuenta de una reunión que habría mantenido su padre Héctor Ciccone con Amado Boudou para negociar la venta de la imprenta. No obstante, desde el entorno del Vicepresidente aseguraron que ese documento ya había sido desmentido por el propio escribano que aparece certificando el acta.

Graciela Ciccone, hija de Héctor Ciccone, declaró como testigo ante el juez Ariel Lijo y presentó un acta de siete párrafos firmada por su padre el 2 de mayo de 2012, un mes antes de su muerte, y certificada ante el escribano Carlos Arturo Luaces. En ella se da cuenta de una reunión que este socio fundador de la empresa habría mantenido el 1º de septiembre de 2010 en un restaurante de Puerto Madero con el ex ministro de Economía y su socio, José María Núñez Carmona, para negociar detalles de la compra de la imprenta.

En dicha reunión se hablaron y trataron temas vinculados con el devenir de la negociación de nuestra empresa familiar, indicó Ciccone en el documento y agregó que se deja esto manifestado a los fines que otorgue fecha cierta, en el marco de una certificación notarial. Sin embargo, fuentes cercanas a Boudou dijeron que aportó un acta que había sido desmentida en la declaración testimonial del escribano que supuestamente certificó el documento, Carlos Luaces, quien declaró ante Lijo en febrero de 2013.