

Por caprichos del calendario, el 27N es una efeméride clave tanto para el kirchnerismo como para los renovadores. Hoy se cumplen cuatro años del fallecimiento de Néstor Kirchner. Y también, 12 meses atrás, Sergio Massa se impuso en las legislativas enfrentando a la Casa Rosada y al gobernador bonaerense Daniel Scioli, comicios que lo catapultaron como presidenciable. Ambos conmemorarán su propio aniversario.
Tal como ya contó este diario, a la ya tradicional visita de Cristina Fernández de Kirchner en el mausoleo de Río Gallegos, en su intimidad familiar, el colectivo de agrupaciones K Unidos y Organizados, encabezadas por La Cámpora, realizará un festival de homenaje en la ex Esma. En el resto del país habrá otros actos dedicados al ex Presidente. Por ejemplo, un Scioli más kirchnerista que cuando fue su Vice, viajará a Tucumán para recordarlo junto al mandatario local José Alperovich.
Si bien dentro del propio espacio renovador le recomendaban a Massa evitar la celebración justo en la jornada de reflexión de un kirchnerismo que supo integrar, el tigrense mantuvo la invitación a Astilleros Milberg, un lugar de eventos de su terruño. El festejo quedó en pie por una decisión estratégica electoral. "Queremos polarizar con el Gobierno al recordar que somos los que les ganamos el año pasado y que no nos diluimos", explican el subtexto de la celebración renovadora.
Esa visión respalda lo que están mostrando las encuestas: un estancamiento de Massa y un crecimiento del jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, quien ya se imagina en una segunda vuelta frente a un candidato oficialista. El diputado busca arrebatarle ese espacio en el imaginario social al líder de PRO. "Vamos a radicalizar más el discurso", prometen en Tigre ajustar la aguja ideológica más hacia la oposición.
En contraposición, el ex motonauta está más alineado que nunca con la Rosada, imaginando dos escenarios en 2015: sacar una bendición presidencial de candidato de consenso con fórceps o imponerse en las internas del Frente para la Victoria. En ambos precisa morigerar la clásica ambigüedad sciolista. Ayer volvió a pisar Uruguay para respaldar al candidato del oficialista Frente Amplio Tabaré Vázquez, que irá al ballotage con Luis Lacalle Pou, apoyado por el tigrense.
Massa no sólo aprovechará hoy para contraponerse al kirchnerismo. El líder renovador planea lanzar su varias veces postergada candidatura presidencial el próximo 10 de diciembre. Para ase día, como todos los años, se espera que alguna celebración oficial por la recuperación democrática y el Día de los Derechos Humanos, encabezada por la propia Cristina Kirchner. Con ansias de volver a movilizarse, en UyO piensan en colmar la Plaza de Mayo.













