Tras el cierre de listas en la provincia de Buenos Aires, el Congreso le remitió al Ejecutivo los proyectos sancionados que vetará el presidente Javier Milei de cara al 4 de agosto. El Gobierno apuesta a construir el tercio más uno para blindarlos en la Cámara de Diputados, tras satisfacer a los aliados para los comicios locales bonaerenses, y además se pondrá en juego el tejido con los gobernadores de cara al cierre nacional del 17.

Se trata de los tres proyectos de ley que el Congreso aprobó por amplia mayoría para aumentar las jubilaciones y mover el flujo de las Cajas Previsionales; restituir la moratoria previsional; y declarar la emergencia en discapacidad. La Constitución fija un plazo de 10 días hábiles para que se pronuncie el Ejecutivo una vez que los recibe, y esto empieza a correr a partir de este lunes 21 de julio luego de que Martín Menem, presidente de la Cámara baja, demorara su firma durante toda la semana pasada.

Menem no solamente será la cara de la eventual victoria de Milei en Diputados, si consigue blindar los vetos en plena campaña electoral, sino que además es uno de los protagonistas de la polémica lapicera libertaria que selló los acuerdos en la Provincia con el PRO este fin de semana, ya que tanto él como el asesor Eduardo "Lule" Menem conforman el clan del armado de Karina Milei, la presidente de La Libertad Avanza.

Este fin de semana cobraron especial relevancia frente a la reducción de la tropa de Santiago Caputo, que terminó relegada por el armador bonaerense Sebastián Pareja con bendición de los Menem y Karina. El único integrante de la agrupación de Las Fuerzas del Cielo que consiguió un lugar en las listas fue el secretario de Culto, Nahuel Sotelo, pero en el quinto lugar de la Tercera Sección -cuando se barajaba como posible cabeza-.

La principal crítica que esbozan desde los militantes libertarios es que el acuerdo de Pareja consistió en priorizar a "la casta" antes de que a los twitteros, pero la negociación por las listas bonaerenses no es ajena a la construcción de aliados en el Congreso.

"El cierre de listas está hecho para cuidar Diputados", interpretó directamente un allegado de la estrategia electoral de Karina y los Menem en diálogo con El Cronista. Mientras que los militantes en redes criticaron a Pareja, del otro lado Cristian Ritondo, jefe de bloque del PRO en Diputados y uno de los arquitectos de la alianza con Karina en la Provincia, Diego Santilli, Guillermo Montenegro, Soledad Martínez, Néstor Grindetti y Patricia Bullrich, todos quedaron satisfechos con la lapicera violeta.

"Lo importante es que los grandes sectores del PRO PBA están representados", habían destacado, por caso, desde el partido amarillo bonaerense.

Una de las maniobras intencionadas en este sentido fue con la candidatura de la diputada María Sotolano, cercana a la intendente jorgemacrista de Vicente López, Soledad Martínez, como segunda en la boleta de la Tercera Sección, donde encabeza el excomisario de origen en Juntos por el Cambio, Maximiliano Bondarenko. "Fue una jugada maestra", interpretaron desde el oficialismo parlamentario que se encarga del poroteo en Diputados.

Sotolano fue una de las diputadas del PRO que se abstuvo en la votación de jubilaciones en vez de votar en contra y, con su lugar en la boleta, se aseguran de su apoyo al veto.

El cálculo dependerá principalmente del PRO y también de los radicales de Liga del Interior, quienes piden un "gesto" por el tema de discapacidad para apoyar al Presidente en ese caso pero ya confirmaron que defenderán la bandera del equilibrio fiscal. Con esos dos bloques aliados, sumado a la tucumana del monobloque CREO, Paula Omodeo, los libertarios tendrían 70-75 votos a favor del veto.

Esos "héroes" bastarán para bloquear los dos tercios de la oposición, según los cálculos que hacen tanto en despachos del Palacio Legislativo como en Balcarce 50, ya que apuestan a tener ayuda de las ausencias que desajuste el número requerido.

Esto será posible también con la colaboración de los gobernadores, que estarán en plena negociación con el Ejecutivo Nacional en ese entonces por el cierre de las listas para las elecciones legislativas nacionales. El veto se tratará no solamente en plenas conversaciones rumbo al 17 de agosto sino que también en medio de la campaña caliente por la provincia de Buenos Aires, que elige en septiembre, de la cual participará el propio jefe de Estado.

La sesión, de todos modos, puede que tarde en llegar: los vetos deben ser discutidos en comisiones y el diputado José Luis Espert (LLA), quien además es el candidato de Milei para octubre, tiene cerrada la comisión de Presupuesto y Hacienda al punto que durante los últimos meses se viene manejando más bien a través de emplazamientos a pedido de la oposición.

Los bloques opositores de UP, Encuentro Federal y Democracia Para Siempre ya trabajan en llevar al recinto el resto de las iniciativas sobre Financiamiento Universitario y los proyectos de coparticipación para la primera semana de agosto y solo podrían incluir los vetos de Milei si consiguen dos tercios para tratarlo sobre tablas -lo cual implicaría que los tienen para rechazarlos-, a menos que elijan la vía del emplazamiento.