En esta noticia

El fin del beneficio que abrió este lunes el Gobierno con la eliminación de retenciones para granos y subproductos y finalizó en sólo 72 horas puso la mira sobre el ministro Luis Caputo y los grandes exportadores: "no derramó", se quejan los productores.

Este viernes los agroexportadores liquidaron u$s 1750 millones lo que deja un saldo de u$s 2000 millones aproximadamente para este lunes, y así se completarán los u$s 7000 millones comprometidos.

El debate se centra en la soja. Aunque se pagó en promedio u$s 342 dólares la tonelada frente los u$s 297 previo al beneficio, significó un incremento del 15% en los precios, pero se estimaba en 35%.

Los productores plantean que la industria y las empresas agroexportadoras "capturaron" la mitad del beneficio de la eliminación de derechos de exportaciones de quienes aún tenían granos para vender y anticipan una "puja": cuál será el precio que aceptarán para que los exportadores puedan completar los embarques hasta julio de 2026.

Juan Pazo, titular de la Agencia de Control y Recaudación (ARCA) fue el elegido para responder a las quejas del campo. Reconoció que se buscó salir de una "crisis financiera", que repercute en toda la economía y dijo que "los productores tendrán que hacer valer su producto en la negociación con las cerealeras".

Desde la Cámara de la Industria Aceitera (CIARA - CEC), el viernes, aclararon que "mas de u$s 3500 millones de dólares llegarán en estos días, a los vendedores de granos, ya sean productores, acopios y cooperativas".

Shock de divisas

En un comunicado que buscó aplacar los reclamos de productores y las dudas respecto al efectivo ingreso de las divisas, la entidad que presenta a las cerealeras, aseguró que "las empresas agroexportadoras están ultimando los procesos frente al BCRA y ARCA para lograr el ingreso y liquidación de las divisas comprometidas".

Se trata del remanente que queda por liquidar, ya que hasta el jueves se hizo efectivo el ingreso de u$s 3000 millones, aproximadamente.

Sin embargo, el alto volumen de operaciones complicó el ritmo. "Por el volumen de operaciones, se está trabajando en conjunto para que no se caigan los sistemas", indicaron fuentes oficiales a El Cronista.

En sintonía, desde el sector privado explicaron que "hay que cargar todas las operaciones en los sistemas de los bancos y aprobarlos vía BCRA; además cargar en ARCA las mismas operaciones y si ambos sistemas no funcionan, se para el proceso".

Desde algunos sectores interpretan que esta acción que pone en suspenso la liquidación de divisas comprometida, puede responder a una necesidad del Gobierno de "dosificar" el ingreso de las divisas, que requeriría una disposición especial del BCRA.

"El shock de divisas movió todo el mercado", dijo un especialista. Luego de rozas lo $1500, este viernes, el dólar oficial cerró cerca de los $1330 y anotó su mayor caída semanal desde la asunción de Javier Milei, como consecuencia de mayores ingresos del agro.

Sin embargo, salvo que el Tesoro adquiera todo el stock, si se vuelve a volcar un alto volumen de dólares al mercado, el Gobierno se enfrenta a un escenario de escasez hasta fin de año.

Esta opción fue descartada por los privados ya que recaería en "incumplir" la normativa vigente: "se paga al productor 72 horas después de la venta, es decir es una operación de contado", explicaron.

La cocina del anuncio

El anuncio -que fue clave para hacer bajar el dólar luego de dos semanas frenéticas-, se formalizó a primera hora del lunes 22 de septiembre, en la previa al viaje de Javier Milei y Luis Caputo a Estados Unidos. Allí, el mandatario argentino recibió fuerte apoyo de Donald Trump.

Mientras las ventas de soja se disparaban y el dólar volvía a ubicarse por debajo del techo de la banda en la Argentina, Scott Bessent, titular del Tesoro de EEUU, confirmó vía X la firma de un swap por u$s 20.000 millones pero, en el mismo mensaje, incluyó una advertencia a los exportadores locales.

Entre los puntos que trabaja con funcionarios de la Argentina, Bessent mencionó: "poner fin a la exención impositiva temporal para los productores de commodities que liquidan divisas", en clara alusión a la eliminación de retenciones que beneficia principalmente a la soja.

La línea, no pasó desapercibida en el mercado local que, ante la posibilidad de un fin anticipado, aceleró el registro de Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior (DJVE). El mensaje que algunos interpretaron como una "llamada de atención" al titular de Economía, caló y, a última hora de ese día, se cerró la ventana de oportunidad.

El mercado manda

Según se quejó la Sociedad Rural Argentina (SRA), los productores sólo pudieron vender 6,2 millones de toneladas por el equivalente a u$s 2300 millones, un 33% del total. En cambio, 7 multinacionales registraron ventas que se oficializarán entre noviembre y marzo del año próximo, por cerca de u$s 5000 millones.

La hipótesis de los productores señala que este grupo de firmas de peso internacional, poseían mayor información y pudieron "prepararse" para hacer los registros; en cambio, ante la medida sorpresiva, los productores no reaccionaron con la misma celeridad, incluso, los más pequeños ya se habían desprendido de su producto.

Ante estas acusaciones de "complicidad" el designado para dar explicaciones fue el titular de ARCA. "Siempre que tomamos una decisión de fondo, nunca nadie sabía", aseguró.

"Los productores me están puteando de colores", reconoció pero insistió en que no fueron perjudicados. "Hoy están ganando un 15% más que el día viernes. Las cerealeras no tienen el volumen declarado para vender y tendrán que comprar alrededor de 4000 millones de dólares a los productores en los próximos 90 días", expresó.

Sin embargo, este es uno de los centros del debate ya que según las entidades del agro las operaciones se concretaron a precios inferiores a la capacidad teórica de pago; además, con el retorno de las retenciones al 26%, la competitividad para el productor va a bajar.

Lo que explican es que los valores del mercado no llegaron a cubrir la potencial suba por la quita de los derechos de exportación, lo que generará una fuerte puja en los próximos meses cuando los exportadores vayan a busca producto para cubrir los embarques.

Nicolás Pino, presidente de la SRA, se quejó de que "muchos productores quedaron afuera" y que el "ánimo nos duró poquito".

La Federación Agraria Argentina (FAA) fue más dura. Su presidenta, Andrea Sarnari, remarcó que la medida solo generó imprevisibilidad y que los pequeños y medianos productores fueron los más perjudicados, ya que muchos ya no tenían la cosecha anterior para comercializar.

Coninagro, por su parte, lamentó que la medida "no alcanzó a derramar sobre el primer eslabón de la cadena, el productor agropecuario".

"Los indicios apuntan a que fue una ventana de oportunidad y un negocio para unos pocos", expresó la entidad que conduce Lucas Magnano. "Creemos que la eliminación de retenciones debe transformarse en una política de Estado permanente, que brinde previsibilidad y horizonte a quienes generan la producción primaria", agregó.

Precios y plazos

Si bien las exportaciones fueron registradas (DJVE) no se embarcarán automáticamente. Según los tiempos de embarque declarados sólo un 9% lo hará en octubre; 20% en noviembre y 50% en diciembre de este año, mientras que el 20% restante recién se despachará a lo largo del año 2026.

Esta dinámica que significó una baja de u$s 1500 millones en la recaudación fiscal, muestra, por un lado, que "eligieron declarar embarques cuando los precios FOB oficiales eran más bajos, para liquidar menos dólares", explicó un informe de MATE.

Y, al mismo tiempo, que "tienen tiempo de abastecerse de granos a precios descontados los derechos de exportación cuando termine la vigencia del decreto ya que no deben comprar los productos para embarcar en el corto plazo".

Esto, agregó el documento, anticipa una "puja" con los productores en la cual "las agro-exportadoras tienen todo para ganar" ya que le cargarán derechos de exportación al productor que no van a abonar al Estado.

Presión de EE.UU.

A la par de la tensión interna, el otro frente que surfeó el Gobierno fue el señalamiento que realizó el jefe del Tesoro norteamericano, en plena negociación por una herramientas que significará un "salvataje" para que la Argentina atraviese una nueva crisis financiera.

Fuentes cercanas a Economía deslizaron que el mensaje estadounidense no buscó "apurar" el fin de la eliminación de retenciones, sino que apuntó a que no se extendiera más allá de la fecha fijada o en caso de que se alcance antes el monto de u$s 7.000 millones.

La venta de soja se volvio un aspecto central en las negociaciones con EEUU, por el impacto en la guerra comercial que protagoniza Trump con China.

Por la recarga de aranceles de 20%, China mantiene un bloqueo con los productores de soja de EEUU y, hasta el momento, no ha realizado ninguna operación.

En cuanto el producto argentino salió a la venta, con una mejora significativa en el precio internacional (en torno al 3,8%), el gigante asiático absorbió al menos 15 cargamentos.

Este movimiento, que causó malestar en los productores norteamericanos que vienen perdiendo millones, fue uno de los detonantes del mensaje del funcionario de Trump, quién avivó el fin de la eliminación de retenciones.