

El diputado nacional y exministro de Defensa, Agustín Rossi, participó del programa “Nada Personal: el debate de la semana”, que se emite por El Cronista Stream y conduce Mariana Brey, junto a un panel integrado por Julián Yosovitch, Florencia Barragán y Agustín D’Attellis. En una conversación extensa, el legislador analizó los dos primeros años del gobierno de Javier Milei y evaluó sus efectos sobre la sociedad.
Rossi planteó desde el inicio una mirada crítica sobre el rumbo económico. Sostuvo que, para evaluar una gestión, el parámetro central debía ser “si la gente está mejor o peor”. Afirmó que, desde diciembre de 2023, “la gente está peor. Los argentinos lo están pasando peor”, y enumeró indicadores que, según su perspectiva, reflejaron ese deterioro: “Los argentinos tienen menos trabajo, menos salario, menos jubilaciones; hay menos universidades; las personas con discapacidad están más complicadas”. Añadió que “hay industrias que cierran y argentinos que pierden su trabajo”.

Para el diputado, el empeoramiento no se restringió a los ingresos familiares. Señaló que se registró un retroceso en la actividad productiva y en la inversión pública. “Todos los días te levantás y tenés noticias de que hay industrias que están quebrando, o pasando de ser fabricantes a ser importadoras”, afirmó. También cuestionó la suspensión de obras de infraestructura y la caída del poder adquisitivo de jubilados y pensionados. “Me parece que el gobierno de Milei fue en el sentido incorrecto”, resumió.
Consultado sobre si comparaba la actual situación con la gestión anterior, Rossi aclaró que su evaluación se circunscribía al período iniciado en diciembre de 2023. “Estoy juzgando la gestión de Milei. Digo que la sociedad argentina está peor que hace dos años”, insistió.
El intercambio con los panelistas incluyó un tramo sobre los ingresos de los funcionarios. Ante la pregunta sobre si él mismo llegaba a fin de mes, Rossi respondió: “Hasta ahora no tenía sueldo; asumo hoy y todavía no cobré”. Sin embargo, rechazó que su situación personal fuera relevante para el análisis. “Comparar el sueldo de un dirigente político con lo que le pasa al conjunto de la sociedad es una falacia”, expresó. Agregó que “a la gente no le importa si yo llego a fin de mes; le importa que ella no llega a fin de mes”.

El diputado recordó su trayectoria —“fui ministro de Defensa, titular de la AFI, jefe de Gabinete y candidato a vicepresidente”—, pero enfatizó que su rol actual debía definirse por el mandato que recibió. “Soy un diputado nacional electo por el 28% de los santafesinos”, señaló. Explicó que su campaña se centró en un objetivo puntual: “Dije: hay que frenar a Milei”. Y justificó ese planteo: “Era frenar a Milei para que cambie”.
Rossi subrayó que su responsabilidad parlamentaria estaba directamente ligada a ese electorado. “Tengo que representar a ese 28% que me votó, que cree que hay que aumentarle a los jubilados y sostener la universidad pública”, afirmó.
La discusión avanzó hacia el financiamiento del sistema previsional y el modo en que los gobiernos administran los recursos. Ante la pregunta sobre cómo se podían sostener incrementos en el haber mínimo, Rossi rechazó la idea de que esos aumentos resultaran falsos o que dependieran exclusivamente de la emisión. “A los jubilados les aumentaban”, afirmó, frente a la réplica de que esos incrementos no tendrían un impacto real.
Insistió en que, durante la gestión anterior, sí existieron políticas de desarrollo: “Hubo más de 5.000 obras públicas, hicimos 140.000 viviendas, hicimos el gasoducto Néstor Kirchner; gracias a eso hoy la Argentina tuvo superávit en la balanza energética”. Y remató: “Lo que ustedes no pueden hacer es tapar el sol con las manos”.
El panel le consultó por qué la cuestión jubilatoria se utilizaba como argumento recurrente en el debate político. Rossi rechazó que existiera una manipulación discursiva. “Los jubilados antes tenían remedios gratis y hoy no los tienen”, sostuvo. Sobre cómo resolver un esquema previsional sostenible, explicó: “Tenés que tener una política de crecimiento económico que recaude impositivamente mejor y distribuya mejor la plata”.
Cuestionó, en esa línea, la reducción de derechos de exportación sobre productos agropecuarios. “Si vos bajás las retenciones, tenés menos ingreso”, señaló, ante la repregunta sobre si eso implicaba rechazar la baja de impuestos al sector. “No me cambies las cosas”, respondió, y aclaró que su posición apuntaba a la consistencia de la administración fiscal.
Para ilustrar su planteo, recurrió a una comparación doméstica: “Vos tenés todos estos gastos; como tenés todos estos gastos, trabajás en cinco lugares para poder pagarlos”.
Según Rossi, el presidente debía aplicar un criterio similar: “Tengo que pagarles bien a los jubilados, tengo que pagarle bien al sistema universitario, tengo que tener un plan”. Evitó cuestionar las intenciones del gobierno: “No estoy juzgando la voluntad de Milei”.
Sin embargo, remarcó que la evaluación debía centrarse en los resultados. “Cuando uno gobierna, tiene que decir para quién gobierna”, afirmó. Y concluyó: “Me hago un plan económico que me permita recaudar para garantizar todo esto”.










