Opinión

¿Te robaron el celular? El protocolo definitivo para que (además) no te vacíen las cuentas

En esta noticia

Nuestros teléfonos se han convertido en una extensión vital de nuestra existencia, son portadores de cientos de datos personales, incluyendo información financiera delicada. Los Bancos y Fintech nos repiten una y otra vez: no divulgar, no compartir, ni caer en estafas. Pero, ¿qué pasa cuando perdemos el control del teléfono? ¿Qué ocurre si nos roban o perdemos el celular con toda esa información financiera? 

Hace apenas un par de años, el negocio del robo de celulares se centraba en su reventa. Hoy en día, si bien esa práctica no ha desaparecido por completo, se ha diversificado, creando "nuevas áreas de negocio" para la delincuencia. 

Ahora, lo atractivo de robar un celular es acceder a las aplicaciones donde se almacena dinero. Compras por aplicaciones de pedidos, carga de saldo de transporte público, transferencias de dinero, préstamos personales que, como regalo, dejan una deuda, compras en línea de todo tipo. Dondequiera que tengas vinculada tu tarjeta de crédito, ahí buscan su botín.

Por esta razón, comparto este protocolo preventivo para ejercer otro tipo de amor propio: el autocuidado financiero.

Quien juega con tu tiempo, juega con tu vida (¡y con tu dinero!)

El tiempo juega un papel crucial en estas situaciones, por lo que es fundamental actuar con premeditación y eficacia. La memoria puede traicionarnos en momentos de estrés, ya que el cuerpo reacciona liberando hormonas que pueden afectar negativamente la memoria y el pensamiento claro, lo que puede resultar en una sensación de bloqueo mental. 

En este estado, la capacidad de tomar decisiones y recordar información crítica, como la clave para bloquear una aplicación, se ve comprometida debido a la priorización de respuestas de supervivencia inmediata sobre funciones mentales más complejas.

Por esa razón te presento los pasos simples y efectivos para mantener seguro tu dinero en caso de robo o extravío de tu celular.

Paso 1: prevenir es mejor que perder plata

Guarda el número IMEI de tu celular: abre la aplicación del teléfono y marca *#06#. Luego, guarda la captura del código IMEI en una carpeta en la nube o escríbelo en una agenda segura, a la que solo vos tengas acceso. Este código es único para cada dispositivo, una especie de DNI, y es muy útil para reportar el robo a la policía y bloquear el teléfono con las operadoras de telefonía.

Coloca doble llave: habilita la autenticación de dos factores (2FA). Para ello, configura la autenticación de dos factores en todas tus cuentas que lo permitan, incluyendo redes sociales. Guarda los códigos de respaldo en un lugar seguro, que no sea el celular.

Pone rejas a tus aplicaciones: activa la encriptación biométrica disponible en tu dispositivo, como Face ID en iPhone, por ejemplo. Hacelo en todas las aplicaciones bancarias, de pagos y WhatsApp. Asegúrate de no tener la cuenta o el número de respaldo en el mismo celular para evitar perder acceso a tus cuentas en caso de robo.

Blinda tu SIM: llama a tu operadora telefónica para establecer un PIN para tu tarjeta SIM. Cambia el PIN en la configuración de red celular para evitar que se use tu chip en otro dispositivo. Este paso es muy importante para proteger la cuenta de WhatsApp, por ejemplo.

Tirale una soga a tu memoria: Utiliza un gestor de contraseñas para mantener tus credenciales seguras. Considera compartir acceso a tu cuenta de gestor de contraseñas con un amigo de confianza en caso de emergencia, para que en caso de robo o pérdida, pueda acceder y borrar todo de inmediato.

Paso 2: llorar solo el teléfono

Bloquea todo: utiliza la función "Find My iPhone" en iOS o "Find My Device" en Android para marcar el dispositivo como perdido y bloquear el acceso remoto. Llama a tu compañía de celular para reportar el IMEI y asegurarte de que no se pueda usar más. Comunícate con tu banco emisor para reportar el robo de tu tarjeta y solicitar el bloqueo inmediato.

Desvincula tus cuentas: las de servicios como redes sociales, correo electrónico, Airbnb, Uber, Mi Argentina, etc., y cambia las contraseñas de todas tus cuentas asociadas a servicios de compras y pagos en línea.

Controla cada peso: monitorea tus estados de cuenta bancarios y de tarjeta de crédito para detectar actividades sospechosas y notifica a tu banco o Fintech sobre cualquier transacción no autorizada. Para esto es necesario tener un registro de gastos para detectar si hay algo diferente. Lo que no se registra, no se puede controlar. También revisa que no hayan tomado deuda, es decir que no se hayan creado nuevos préstamos desde tu teléfono.

Advertencia para todos: ponte en contacto con el servicio al cliente de todas las aplicaciones afectadas para notificar el robo y solicitar asistencia para proteger tu cuenta y tus datos financieros.

Por último, si tienes adultos mayores en la familia, o amigos, parientes que no están familiarizados con las finanzas digitales, puedes hacerles un gran regalo: crea un protocolo para su celular, personaliza esta experiencia y ayuda a esa persona a crear un entorno más seguro y saludable.

Temas relacionados
Más noticias de robo de celulares
Noticias de tu interés

Compartí tus comentarios

¿Querés dejar tu opinión? Registrate para comentar este artículo.
IG

Isabel Giselli